Héctor Cordero, diputado a la Asamblea Nacional, rechazó la masacre en el Centro Penintenciario de los Llanos, al tiempo que indicó que los hechos «demuestran el fracaso de la política penitenciaria de la usurpación».
El también presidente de la Comisión Permanente de Cultos y Régimen Penitenciario de la AN dijo que Maduro «solo puede controlar las cárceles con la acción de las armas».
«Dádivas, complacencias, utilizar a reos para control social solo genera complicidad y dependencia de los reos con los custodios», indica.
El viernes ocurrió un motín en el centro penitenciario, que está ubicado en el estado Portuguesa, y que acarreó más de 40 fallecidos y decenas de heridos.
La ONG Una Ventana a la Libertad, dedicada a la defensa de los derechos humanos de los privados de libertad, maneja dos versiones del suceso.
La primera responde a una protesta y reclamos de los reclusos por la escasez de comida y agua, pues para alimentarse dependen de sus familiares, y algunos se encuentran fuera de la entidad. Además, las visitas están suspendidas desde que comenzó el confinamiento generalizado en Venezuela por el covid-19.
La otra versión indica que Olivo, el «pran» del penal, presuntamente encargó un motín de un grupo de reos armados como respuesta a la muerte de «su mano derecha» por el Cicpc, la Dgcim y la policía en Portuguesa.
Una nota de prensa del Centro de Comunicación Nacional informó que la Comisión hará una sesión extraordinaria para comenzar una profunda investigación por esta masacre.