En una entrevista para el diario español El País, el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, reflexionó acerca de varios temas al finalizar un año complejo para el país.
Una de las preguntas del periodista es en qué considera Guaidó que se equivocó. Respondió que probablemente él y quienes le acompañan en su lucha subestimaron la capacidad «de hacer daño de la dictadura».
«Creo que faltó el factor Fuerzas Armadas. No ha sido suficiente para lograr vencer el miedo, no solamente de la población sino de la coalición dominante, del círculo interno de la dictadura que se podría creer que por momentos están dispuestos a una salida negociada, como en el caso de la mediación de Noruega», respondió.
Guaidó indicó que pensaron que Nicolás Maduro y su séquito iban a abandonar más rápido el poder. Sin embargo, subraya que el quebrantamiento interno del régimen ha sido significativo. Y menciona casos de abandonos a Maduro como el de Luisa Ortega Díaz, Rafael Ramírez, Cristopher Figuera o los militares que se rebelaron el 30 de abril en La Carlota.
«El resquebrajamiento de la coalición dominante ha sido mucho más lento de lo que quisiéramos, el reto es ver cómo generamos la presión suficiente para la transición a la democracia en Venezuela. Hay que alinear todas las variables simultáneamente: la presión social, el forzar definiciones, extender los puentes con los que podrían dar un paso y extender alternativas, incluso al dictador», expresó.
Consultado, otra vez, sobre la posibilidad de cambiar el poder por medio de una intervención militar, expresó:
«Creo que no. Yo no veo una intervención militar formal. Yo creo que hay otra página distinta. Tenemos la posibilidad de elegir un nuevo CNE que abriera las puertas a unas elecciones realmente libres. Existió la iniciativa de proponer un Consejo de Estado para que se diera la transición. Poner en la mesa la opción de una intervención, que es el símil de una guerra, no creo que sea positivo, ni es factible. Lo que tenemos que buscar son herramientas para desplazar la dictadura».
Usurpación en Venezuela
El presidente encargado considera que los acciones de este año no han sido un fracaso. Señala que sería injusto si esto se ve desde la variable de que Maduro sigue en Miraflores.
«Todo el mundo dice que hay una usurpación en Venezuela. Maduro ejerce su función como dictador, no como presidente elegido. Hay terror, hay violaciones de derechos humanos, ecocidio a través del uso y abuso de los recursos del Estado«, explicó.
Entonces, enfatiza, en la actualidad la lucha ya no es solo una ilusión, como se veía en 2018, sino que es un «cuándo o cómo».
«La diferencia pareciera sutil, pero es muy distinto. El cuándo implica qué estoy buscando y el cómo, que estoy buscando las herramientas para lograrlo», precisó.