El presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, condenó la detención del dirigente opositor ruso Alexey Navalny por parte del gobierno de Rusia.
Guaidó aseguró que la medida es una violación de los derechos humanos por parte de uno de los principales aliados del régimen chavista. «La detención arbitraria de Navalny evidencia una clara violación a los DDHH por parte de uno de los principales aliados del régimen de Maduro», comentó en su cuenta oficial de Twitter.
«Alzamos la voz por su liberación y solicitamos al mundo libre actuar en conjunto en su defensa, y contra la persecución a la disidencia», dijo.
La Policía detuvo al opositor ruso a su llegada al aeropuerto moscovita de Sheremétievo, cuando se disponía a pasar el control de pasaportes, constataron periodistas de la AFP en el lugar.
Los servicios penitenciarios rusos (FSIN) confirmaron en un comunicado la detención de Navalny, de 44 años de edad, quien “continuará detenido hasta la decisión del tribunal” sobre su caso.
El opositor regresaba en avión desde Alemania, donde permaneció varios meses para recuperarse de un presunto envenenamiento que atribuye a los servicios especiales rusos por orden directa del presidente Vladimir Putin.
Navalny, según el FSIN, incumplió cuando estaba en Alemania las condiciones de la condena de 2014, que le obliga a presentarse al menos dos veces por semana en la administración penitenciaria.