El presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, llegó por sorpresa este domingo a Bogotá para reunirse con el presidente Iván Duque. Además, para participar este lunes en la III Conferencia Ministerial Hemisférica de Lucha contra el Terrorismo.
Al caer la tarde, Guaidó fue recibido por Duque a las puertas de la Casa de Nariño. Allí, entró en el Patio de Armas, por donde suelen pasar los jefes de Estado extranjeros que visitan el país.
El líder venezolano, vestido con un traje oscuro sin corbata, caminó hacia el palacio por una alfombra roja en la que la Guardia Presidencial le hizo calle de honor, para luego iniciar la reunión a puerta cerrada con Duque.
Desde enero de 2019, cuando fue reconocido por Colombia, Estados Unidos y más de medio centenar de países como presidente encargado de Venezuela, esta es la segunda vez que Guaidó desafía al régimen de Nicolás Maduro y sale de Venezuela para trasladarse a Colombia.
La primera vez fue el 22 de febrero del año pasado. Ese día llegó a la ciudad de Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela.
Desde allí, lideró un fallido intento de ingresar a su país con una caravana de ayuda humanitaria.
El bloqueo de la frontera por parte de la Guardia Nacional Bolivariana e incidentes violentos impidieron ese día el paso de Guaidó. Ante esos hechos, Maduro rompió las ya maltrechas relaciones con Colombia, y en ese estado de mantienen desde entonces.
Encuentro con Duque
La presencia de quien es además jefe del Parlamento en Bogotá fue confirmada desde temprano por Duque. También por el propio Guaidó, por Twitter, pero sin que diera detalles de cómo hizo para viajar a Colombia.
«Ya en Colombia, agradecido con el presidente Iván Duque por su apoyo a la lucha del pueblo venezolano», manifestó el líder venezolano en la red social.
De acuerdo con Guaidó, en su visita se generarán las condiciones que conducirán a la libertad de Venezuela. Aseguró que su regreso al país estará lleno de buenas noticias.
Duque, por su parte, dio la bienvenida al presidente interino a Colombia. Anunció el encuentro de trabajo de ambos este domingo.
Conferencia contra el terrorismo
Se espera que Guaidó se reúna mañana con el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, quien llegará este lunes a Bogotá para participar en la conferencia contra el terrorismo, que al parecer es el motivo central del viaje del líder venezolano.
«El presidente Juan Guaidó participará, este lunes, en la Cumbre Hemisférica de Lucha contra el Terrorismo«, anunció Duque.
La conferencia, en la que estarán representados 20 países americanos, se efectuará en la Escuela de Cadetes de la Policía General Francisco de Paula Santander, donde hace un año el Ejército de Liberación Nacional puso un carro bomba que mató a 22 cadetes, entre ellos a una ecuatoriana.
Agenda secreta
Ni el gobierno colombiano ni Guaidó han revelado los planes de este una vez que concluya la cita.
Hace 11 meses, tras fracasar en su intento de entrar a Venezuela por la frontera entre Cúcuta y San Antonio, en el estado de Zulia, Guaidó se trasladó a Bogotá.
Allí fue recibido con honores de jefe de Estado y participó en una reunión del Grupo de Lima.
Días después, visitó varios países suramericanos y regresó posteriormente a Venezuela en donde circuló una versión de su posible detención por dejar en evidencia al régimen de Maduro al no obedecer la prohibición del salir del país.
Crítica de la FARC
La llegada de Guaidó a Colombia fue criticada por Sergio Marín, uno de los miembros del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, en la Cámara de Representantes.
«Esta vez Guaidó vino por sus propios medios o Los Rastrojos le volvieron a ayudar«, escribió en Twitter.
La referencia de Marín tiene que ver con unas fotos publicadas en septiembre del año pasado por el presidente de la asamblea nacional constituyente de Venezuela, Diosdado Cabello, en las que se ve a Guaidó junto a dos hombres identificados como miembros de la banda de origen paramilitar Los Rastrojos que, supuestamente, lo habrían ayudado a pasar a Cúcuta.
Guaidó siempre negó que conociera a los criminales. En varias oportunidades dijo que el día que cruzó la frontera se tomó fotografías con cientos de personas.