Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana reprimieron a la comunidad indígena wayú que vive en Guarero, La Guajira, estado Zulia, por protestar por la escasez de agua y comida en el lugar.
La ONG Codhez denunció que los militares utilizaron bombas lacrimógenas, perdigones e incluso balas para reprimir a los manifestantes.
Lisbeth González, dirigente de Guarero y parte de la etnia wayú, resultó herida en la cara por un perdigonazo. Videos compartidos en Twitter muestran a los guardias disparando desde los techos de los comercios de la localidad.
El vicepresidente de la Asamblea Nacional, Juan Pablo Guanipa, indicó que las protestas están ocurriendo en Guarero desde el sábado.
«Hoy domingo continuó la protesta pacífica de los habitantes en Guarero y la respuesta de la dictadura fue disparos, represión y violencia contra una población indígena desarmada que solo exigía un derecho fundamental como lo es comida», escribió en la red social.