La Organización No Gubernamental FundaRedes denunció que se duplicó la criminalidad en los estados fronterizos de Venezuela en el tercer trimestre del año 2020, correspondientes a los meses julio, agosto y septiembre.
Un total de 362 homicidios, 34 desapariciones y/o secuestros, además de 148 enfrentamientos armados, situaciones en las que están involucrados funcionarios de cuerpos de seguridad del Estado bien sea por participación activa o por omisión, registró el informe Curva de la Violencia.
El director general de FundaRedes, Javier Tarazona, destacó el alarmante incremento de casos de feminicidios e infanticidios. Esto debido a que del total de homicidios documentados, 14 fueron contra mujeres y 13 contra niños y adolescentes.
Tarazona señaló que Zulia ocupa el primer lugar en cifras en este período de análisis. Hubo 143 homicidios, 77 enfrentamientos armados, y 4 desaparecidos producto de la disputa por el control de cultivos de droga y narcotráfico entre grupos armados irregulares.
«En el caso del estado Bolívar ocupó el segundo lugar durante el tercer trimestre del año 2020, y registró un aumento de 100% en violencia, ya que se documentaron 113 homicidios, 43 enfrentamientos y 15 desapariciones o secuestros de personas, una zona del país donde los grupos armados irregulares se disputan el control del territorio por la explotación minera para obtener fuentes de financiamientos y sometimiento de la población», explicó.
Falcón también sufrió un aumento preocupante en todas las unidades de análisis de la Curva de la Violencia, con 43 homicidios, 15 enfrentamientos armados y un caso de desaparición o secuestro.
Para el estado Táchira se registraron 36 homicidios, 10 enfrentamientos armados y 10 desapariciones o secuestros. Una entidad que sufre las consecuencias de la migración forzada a través de la frontera, y de la expansión de la presencia de grupos armados irregulares.
Apure tuvo 26 homicidios, 4 desaparecidos y 3 enfrentamientos armados, mientras que en Amazonas se registró un homicidio. Sin embargo estas cifras podrían ser más elevadas, debido a que existen dificultades para la documentación de la información, pues hay una grave censura a los medios de comunicación, con amenazas a periodistas y trabajadores de distintas plataformas informativas que les impiden dar a conocer lo que en estas regiones ocurre, y que a su vez impacta en la labor de los activistas y defensores de derechos humanos.
Tarazona advirtió que la situación en Venezuela es alarmante, ya que todo apunta a que la violencia continuará creciendo de manera exponencial para el último período de 2020. Además el panorama es aún más desalentador para 2021, debido a la precariedad de las condiciones de vida de los ciudadanos, y la falta de respuesta del Estado ante la emergencia humanitaria compleja del país.
FundaRedes criticó la gran tenencia de armamento de forma ilegal para cometer delitos y la creciente criminalidad en momentos en que se tiene movilidad restringida debido a la pandemia por covid-19.