La ONG Fundaredes denunció el aumento significativo de jóvenes reclutados en Apure por grupos armados irregulares. La organización señaló que, al parecer, les ofrecen a los jóvenes dinero a cambio de que realicen trabajos inherentes al cultivo y atención de sembradíos de coca y marihuana.
Juan García, coordinador de Fundaredes en Apure, señaló que los jóvenes se encargan incluso de la recolección de la hoja de estas drogas para su procesamiento final.
“La mayoría de estas personas reclutadas por los grupos armados son migrantes que huyen de la emergencia humanitaria compleja venezolana”, denunció Garcia. Los trabajos se llevan a cabo en la línea limítrofe entre Colombia y Venezuela. Una vez que los jóvenes llegan al sitio se percatan que la oferta es para laborar con cultivos y procesamiento de sustancias ilícitas.
García detalló que esta modalidad la realiza la actual disidencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
“El modus operandi constituye en una nueva forma de aprovechamiento, ante las enormes debilidades sociales que presentan hoy los núcleos de venezolanos”, señaló.
Narcotráfico en la frontera
“Quieren incorporar a las personas en su estructura criminal de fortalecimiento a todo el andamiaje correspondiente al narcotráfico”, explicó.
A su juicio es una situación alarmante, porque representa un aprovechamiento de jóvenes que migran a países vecinos en busca de mejores oportunidades. Sin embargo, muchos de estos se convierten en presa fácil de los grupos armados irregulares que operan en el territorio venezolano.
En tal sentido García calificó como preocupante la situación a las que se somete el migrante venezolano.
“Desde Fundaredes hacemos énfasis a la población migrante de tomar las consideraciones respectivas con relación a esta forma de operar de la guerrilla y el narcotráfico” destacó. Concluyó que desde Fundaredes continuarán con la labor de documentación y denuncia para que esta situación no quede impune.