Katherine Martínez, directora de la ONG Prepara Familia, aseguró que los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana que allanaron la sede de la organización este martes no contaban con ninguna orden judicial para realizar el procedimiento.
En una entrevista radial con Román Lozinski, Martínez denunció que es la segunda vez en menos de una semana que se presenta una situación irregular en el centro de acopio de la ONG.
El domingo 12 de enero la directiva de Prepara Familia recibió el llamado de varias personas que habitan en los alrededores de la sede de la organización. Los vecinos le informaron que en el sitio se encontraban personas ajenas a la ONG tratando de entrar a la ONG.
Al llegar al centro de acopio, Martínez contó que tres personas invadieron la sede y tras una larga discusión finalmente se retiraron.
Este martes 14 de enero nuevamente se presentaron en el sitio estas tres personas, pero esta vez acompañados de funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana.
Cuando los miembros de Prepara Familia acudieron a la sede, los agentes ya habían sacado a la calle muchas de las cajas de donativos. La PNB alegó que recibió una serie de denuncias sobre irregularidades dentro de la ONG.
Martínez dijo que luego de charlar con los funcionarios y mostrar todo el papeleo requerido, devolvieron los donativos y se fueron.
La directora de la ONG indicó que debido al asedio recibido por parte de los organismos de seguridad, se mudarán de sede en las próximas semanas. Esto con la finalidad de resguardar los donativos y poder continuar realizando su trabajo.
Si bien destacó que es posible que no puedan trabajar por algunos días mientras realizan la mudanza, afirmó que retomarán las labores.
Prepara Familia es una organización que desde 2008 se dedica a defender los derechos de los niños y niñas que se encuentran hospitalizados. Especialmente aquellos que padecen patologías crónicas y se encuentran internados en el hospital J. M. de los Ríos, así como en otras unidades pediátricas del país.
Los miembros de la ONG se encargan de armar combos con insumos que reparten entre los menores enfermos hospitalizados.