La Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) confirmó este jueves que dos personas murieron y otras seis resultaron heridas, entre ellos tres militares, durante un enfrentamiento registrado con mineros ilegales en el Parque Nacional Yapacana.
En un comunicado, la institución explicó que, el miércoles, unos «400 efectivos procedieron al desalojo, desmantelamiento y destrucción de más de 500 estructuras clandestinas utilizadas para la minería ilegal» en un sector del estado Amazonas.
«Al momento del abordaje, cuando se conminaba a todas las personas allí presentes a abandonar pacíficamente el sector, un grupo de mineros atacó sorpresiva y premeditadamente a los funcionarios con armas blancas y de fuego», aseguró la FANB en el texto.
Esta acción «generó dos personas fallecidas y tres heridas, así como tres efectivos militares también heridos», prosigue el escrito, en el que no se aporta más información sobre quienes perdieron la vida.
Más temprano, la asociación civil Kapé Kapé dijo que las víctimas habían sido identificadas como Kenny Carvajal, oriundo de Los Pijiguaos, municipio Cedeño, estado Bolívar, y Luis Manuel Higuera Moreno, de Puerto Ayacucho.
El comunicado, firmado por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, señala que a todos los lesionados «se les está prestando la debida atención médica en la red sanitaria militar y pública».
Sin embargo, en horas de la mañana el diario El Tiempo informó que seis heridos de los enfrentamientos en Yapacana llegaron el miércoles al hospital de Inírida de Guainía, en Colombia.
Por otra parte, la periodista Carolina Azavache señaló que el número de pacientes recibidos en el hospital colombiano fue cuatro, los cuales quedaron identificados como Carlos Gómez González, Eduardo Parenzuela, Dimas Gerardo y Carlos Cortez.
El enfrentamiento surgió específicamente en la mina Cacique de Yapacana, luego de que funcionarios militares, en obediencia a la Operación Autana, trataron de desalojar a los mineros que se niegan a salir de esta área protegida.
El gobierno informó que el presidente Nicolás Maduro «ha solicitado la actuación inmediata del Ministerio Público (Fiscalía), a fin de profundizar las investigaciones correspondientes».
Desde el 1 de julio, la FANB ha desalojado de la Amazonía venezolana a más de 12.000 personas señaladas como mineros ilegales «en una actuación impecable, enmarcada estrictamente en el ordenamiento jurídico y, sobre todo, con profundo respeto a los derechos humanos», subrayó la institución.
Detrás de la extracción ilícita de minerales, agregó la cartera de Defensa, se genera un sinnúmero de crímenes como la prostitución forzada, la trata de personas, el contrabando y la depredación ambiental, delitos por los que el Ejecutivo responsabiliza a terroristas colombianos que, insiste, seguirá combatiendo hasta su total expulsión de Venezuela.
Es la primera vez que la FANB informa de un hecho de violencia durante estas expulsiones en la Amazonía, un operativo ordenado por Maduro que busca limpiar esta región para luego iniciar un plan de recuperación ambiental, especialmente por el uso del mercurio en este territorio.