Familiares de los detenidos por las protestas poselectorales que se iniciaron el 29 de julio pasan calamidades al llegar al Complejo Penitenciario Carabobo, conocido como penal de Tocuyito, para tratar de comunicarse con los presos. Algunos duermen en los vehículos porque no tienen cómo pagar habitación en un hotel o posada.
Ciudadanos viajan desde estados como Trujillo, Mérida, Lara y Vargas.
“Nosotros venimos de Trujillo. Tenemos un familiar de la tercera edad aquí en el penal de Tocuyito. A él lo detuvieron sin estar involucrado en ninguna protesta. Caminaba hacia un establecimiento para comprar carne y lo detuvieron”, denunció a la ONG Una Ventana a la Libertad un pariente de un detenido.
Los familiares temen que la salud del septuagenario se complique porque sufre de insuficiencia respiratoria y de otras patologías. “Él tiene que utilizar inhalador y generalmente le da fiebre”, agregó.
Denunciaron asimismo que en los nueve días que tienen de haber llegado al municipio Libertador, estado Carabobo, no han podido ver al detenido y tampoco saben nada de su estado de salud.
“Esto es algo doloroso para nosotros. Ver lo que está pasando con él es algo injusto porque no debería estar preso”, afirma una prima hermana del adulto mayor, quien anda en el grupo familiar proveniente de Trujillo, en el occidente del país.
Hay esperanza de verlo, a partir del 19 de septiembre, porque es la fecha en la que se cumplen los 45 días que estipula la ley, explica la prima hermana del septuagenario.
Familiares detenidos sin ser partícipes de las protestas poselectorales
Otro grupo familiar que también estaba en los alrededores del penal de Tocuyito sostuvo que a su pariente, un hombre de 34 años de edad, lo detuvieron en Puerto Cabello, litoral carabobeño, cuando caminaba junto con su esposa y su hija de 7 años de edad.
El martes 30 de julio fueron interceptados por funcionarios policiales y se lo llevaron.
“Tampoco sabemos nada de él. Soy su suegra y para nosotros ha sido fatal. Todavía no autorizan visitas de familiares a los detenidos en el penal, pero estamos esperando que lo hagan”, dijo la familiar a Una Ventana a la Libertad.
Asimismo, un ciudadano de apellido Soteldo denunció que las autoridades policiales le pidieron videos donde se pueda demostrar la inocencia de su yerno.
“De dónde vamos a sacar un video si los que deberían tener son los policías cuando lo arrestaron», dijo.
Soteldo señaló que una comisión interceptó a su yerno y se lo llevó preso sin tener nada que ver con las protestas de ese día. Eso fue en Barquisimeto, estado Lara.
“Esto no solo le cambió la vida a mi familiar, sino a todos nosotros. No merecemos estar viviendo esta pesadilla, no es justo”, aseveró una merideña, quien no pudo ahondar en más detalles por su estado emocional.
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