Exiliados venezolanos reunidos este fin de semana en Miami afirmaron que son la auténtica oposición al gobierno de Venezuela, por considerar que la oposición interna es «colaboracionista». Subrayaron que solo con el uso de la fuerza se podrá sacar del poder a Nicolás Maduro.
«Esa oposición no funciona. Es colaboracionista con la dictadura de Nicolás Maduro. Eso empeora la situación, y ya llevamos en esto 20 años», dijo el ex diputado Alberto Francheschi, exiliado en Miami, según un comunicado de los organizadores de la reunión.
Franceschi fue uno de los participantes en Otras Voces, encuentro organizado por el Foro de Miami Paralelo XXI, fundado en Miami por exiliados de Venezuela, Nicaragua, Cuba y otros países latinoamericanos como un antagonista del izquierdista Foro de São Paulo.
Fundaciones venezolanas como Coalición Internacional por Venezuela, Nacidos del Pavimento, DRM Human Rights, Youth and Democracy in the Americas y otras también participaron en la reunión, al igual que organizaciones de Nicaragua y de otros países latinoamericanos.
Un comunicado difundido este domingo, señala que la actitud «colaboracionista» de los opositores en Venezuela impide que Maduro salga del poder, retrasa la vuelta a la democracia y agrava la crisis social y política.
Exiliados exigen uso de la fuerza
El ex senador Pablo Medina sostuvo que la «auténtica oposición tiene en sus manos todos los argumentos y leyes para sacar a Maduro del poder».
«No podemos darle continuidad al tirano Maduro. Ya el pueblo no aguanta más. Tenemos todos los argumentos políticos, diplomáticos y constitucionales, como la aplicación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, e incluso el uso de la fuerza, solo nos queda unirnos y avanzar», dijo.
Los participantes prometieron intensificar sus esfuerzos para lograr apoyo a su lucha de la Administración estadounidense de Donald Trump y los aliados en Suramérica. Defendieron la necesidad del uso de la fuerza en Venezuela.
Víctimas del «castrochavismo»
El nicaragüense Rafael Cárcamo, quien encabezó un grupo de la Fundación Diáspora Global Nicragüense, afirmó que el continente americano es víctima del «castrochavismo» y que en Nicaragua la dictadura de Daniel Ortega sabe que tiene los días contados.
«Debemos unirnos los demócratas y trabajar juntos en una sola dirección en aras de restablecer la democracia en Nicaragua», dijo Cárcamo, quien viajó desde California, Estado Unidos, para esta reunión.
También participaron la ex presa política Irlanda Jerez y el escritor y periodista Aiuel Montoya, ambos de Nicaragua, así como la periodista Maybort Petit y el sacerdote Pedro Freites, de Venezuela.
Los organizadores agregaron que hubo también representantes de organizaciones de Ecuador y Bolivia.