El partido Vente Venezuela (VV), dirigido por la líder opositora María Corina Machado, exigió este viernes la liberación de sus dirigentes nacionales Henry Alviarez y Dignora Hernández, detenidos hace seis meses, acusados de una supuesta vinculación con «acciones violentas» relacionadas con las elecciones presidenciales del 28 de julio.
«Hace seis meses, Henry Alviarez y Dignora Hernández, miembros del Comando con Venezuela, fueron secuestrados por el régimen de Nicolás Maduro«, escribió el Comité de Derechos Humanos de VV en la red social X.
Asimismo, indicó que los dirigentes políticos se encuentran detenidos en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), en Caracas, conocido como el Helicoide, «criminalizados por ejercer sus derechos políticos».
«Exigimos libertad para todos los presos políticos«, añadió.
Henry Alviarez y Dignora Hernández por supuestos planes violentos
El pasado 20 de marzo, el fiscal general, Tarek William Saab, informó de la detención de Alviarez y de Hernández, por su supuesta vinculación con planes violentos relacionados con los comicios presidenciales.
Saab dijo entonces que ambos fueron capturados «en razón de lo que ha confesado Emil Brandt», un jefe regional del comando de campaña de la oposición mayoritaria, quien fue detenido a principios de marzo por estar «incriminado» en planes «violentos» y «terroristas» contra el gobierno.
Venezuela en una crisis política
Venezuela vive una crisis política tras las elecciones del 28 de julio pasado, en las que el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó como el ganador a Nicolás Maduro, sin que hasta la fecha se hayan publicado los resultados desagregados, como estableció el organismo en su cronograma, a pesar de los numerosos llamados dentro y fuera del país.
Por su parte, la oposición mayoritaria, agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), insiste en la victoria de su abanderado, Edmundo González Urrutia, con base en el «83,5 % de las actas electorales» que dice haber obtenido a través de personas que fueron testigos y miembros de mesa durante la jornada electoral, y que publicó en una página web.
Tras la proclamación de Maduro como presidente reelecto, se registraron múltiples protestas en gran parte del país contra el resultado oficial -algunas derivadas en hechos de violencia-, que se saldaron con 25 muertes y más de 2.400 detenidos, según cifras oficiales.