Reymer Villamizar, director de la ONG Amigos Trasplantados de Venezuela, informó este jueves que durante 2019 más de 100 personas rechazaron el órgano trasplantado y al menos 20 fallecieron por las complicaciones.
En Venezuela, unas 3.000 personas se encuentran en riesgo de perder un órgano trasplantado debido a la falta de los medicamentos que requieren para mantenerse saludables.
Villamizar explicó que quienes reciben un trasplante deben tomar un cóctel fijo de medicinas para que su cuerpo no rechace el órgano. De lo contrario recaen y ponen en riesgo su vida.
«Prácticamente a esas personas se les está decretando la muerte», expresó Villamizar en una entrevista concedida a Román Lozinski.
Aseguró que en algunos estados del país, el IVSS no lleva los medicamentos para trasplantados desde hace más de seis meses.
«El IVSS trata de mantener surtidas sus farmacias en Caracas, sin embargo, en el resto del país pueden pasar más de seis meses sin recibir los medicamentos», subrayó.
El director de la ONG Amigos Trasplantados de Venezuela dijo que en septiembre de 2019, representantes del IVSS les informaron que los medicamentos ya se encontraban en el país. Sin embargo, no fue sino hasta diciembre que se les indicó que una de las medicinas no cumplía con las medidas de seguridad, por lo que fue devuelta al fabricante.
De costear el tratamiento por su cuenta, hay fármacos que pueden llegar a costar hasta 800 dólares.
«El trasplantado debe invertir más de 1.000 dólares mensuales en las medicinas», agregó Villamizar.
Más de 5.000 personas se encuentran a la espera de un trasplante en Venezuela, aun cuando los procedimientos se encuentran paralizados desde hace más de dos años.