El primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, está presionando a las instituciones judiciales del régimen para que se reactive el proceso legal contra El Nacional por “daños morales”.
Luego de una solicitud introducida el 29 de enero, la Sala de Casación Civil del TSJ ordenó al Juzgado Tercero de Primera Instancia del Área Metropolitana de Caracas remitir el expediente del caso con el fin de que se avoque sobre el asunto.
Cabello pretende de este modo que se le paguen 1.000 millones de bolívares indexados, la cantidad que ha exigido desde que interpuso la demanda en 2015 pero ajustados a la inflación actual.
Actualmente el fallo de la instancia está firme por el desistimiento de la única apelación.
Cabello demandó a El Nacional en 2015 luego de que este periódico replicó un trabajo del diario español ABC en el que, con el testimonio de Leamsy Salazar, su exescolta, se señalaba al líder chavista de estar vinculado con negocios de narcotráfico.
También llevó a tribunales al diario Tal Cual y La Patilla por este mismo asunto.
“Ya basta de que usen los medios de comunicación para destrozarle la vida a quien no les caiga bien y como medio de chantaje. ¡Que se haga justicia!”, dijo en ese momento Cabello.
Tres años después el tribunal declaró improcedente una apelación interpuesta por El Nacional para defenderse de la demanda del líder socialista.
Pedro Carreño, entonces miembro de la asamblea nacional constituyente, afirmó en ese momento que durante el juicio una medida que supuestamente implica es que El Nacional sea entregado a Cabello.
“El daño moral se causó en 2015 y se va a determinar la cuantía de este monto para que la derecha reaccionaria no ande satanizando, criminalizando y estigmatizando a los ciudadanos. Lo único que se les pidió es que presentaran pruebas de que Diosdado Cabello es narcotraficante. No las tienen”, expresó el ahora diputado.
En diciembre de 2019 Cabello volvió a arremeter contra El Nacional. Aseguró que sería dueño del periódico y que convertiría la sede en una universidad de la comunicación.
“El Nacional tiene un edificio sede extraordinario para una universidad. Apenas tenga la sentencia, me dicen dónde firmar para entregar el edificio para la Universidad Internacional de la Comunicación que anunció nuestro presidente Nicolás Maduro”, dijo.
El ataque de Cabello a El Nacional es otro método de sometimiento del régimen contra la libertad de expresión.
Decenas de organizaciones periodísticas han condenado la decisión del líder chavista, entre ellas la SIP, que en 2016 expresó su respaldo a la directiva y los trabajadores del diario ante las amenazas del oficialismo.
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