VENEZUELA

Denuncian tala de árboles en Chacao para la construcción del nuevo Hard Rock Café

por El Nacional El Nacional

Luego de haber cerrado sus puertas en Centro Comercial Sambil en el año 2020, la cadena de restaurantes estadounidense Hard Rock Café regresó Caracas con una nueva sede ubicada en Los Palos Grandes, Chacao. Sin embargo, la apertura del local provocó críticas, debido a la tala indiscriminada de varios árboles para culminar la construcción del establecimiento.

Usuarios en redes sociales denunciaron que desde hace varios años, autoridades de la administración de Gustavo Duque y el Ministerio de Ecosocialismo aprueban la tala de árboles centenarios en el municipio, lo que provoca daños a la biodiversidad de la zona.

«Muy triste que el nuevo Hard Rock Café de Los Palos Grandes en Caracas, comience derribando árboles centenarios sin ninguna razón», señaló Twitter el periodista especializado en tecnología, Fran Monroy.

En un video publicado por el comunicador, se observa como derriban un gran árbol ubicado frente a la fachada del nuevo local, a pocas horas su inauguración el jueves 29 de diciembre.

Vecinos de Los Palos Grandes vecinos, trabajadores de la alcaldía de Chacao, representantes del local, directores de la Policía Municipal y la Presidenta del Instituto de Ambiente se reunieron en horas de la tarde de este jueves para llegar a consensos.

Duque informó en Twitter suscribieron un acuerdo de convivencia donde se involucran temas como: estacionamiento, insonorización del local, extractores y cuartos de basura, y horarios de funcionamiento.

«Luego de la reunión en el despacho todos los entes mencionados visitaron el local para hacer las mediciones “in situ” y corroborar junto a nuestros inspectores ambientales que todos los parámetros sean cumplidos», señaló el alcalde de Chacao.

En abril de este año varios grupos de ambientalistas denunciaron que la deforestación está fuera de control en Caracas. El arquitecto e integrante de la ONG Plantados, Gabriel Naas, denunció en ese entonces que árboles de más de 150 años de edad son cortados para dar espacio a proyectos de construcción o por simple capricho.