Una delegación del gobierno de Joe Biden visitó Caracas esta semana para abogar por los ciudadanos de Estados Unidos que están detenidos en el país.
El grupo encabezado por el enviado Presidencial Especial para Asuntos de Rehenes, Roger Carstens, ha estado en conversaciones con funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro, según fuentes consultadas por Bloomberg.
En Venezuela se encuentran al menos cuatro ciudadanos estadounidenses detenidos, incluidos Eyvin Hernandez, un abogado, y Jerrel Kenemore, un programador informático, que EE UU afirma fueron detenidos injustamente.
A los dos hombres los arrestaron en la frontera entre Venezuela y Colombia en marzo de 2022, en hechos separados, y acusados de asociación delictuosa y concierto para delinquir.
Venezuela también tiene bajo custodia a dos exboinas verdes, Luke Denman y Airan Berry, quienes fueron encarcelados por terrorismo luego de un presunto complot para sacar a Nicolás Maduro del poder.
Un portavoz del Departamento de Estado confirmó que Carstens visitó el país para “discutir el bienestar y la seguridad de los ciudadanos estadounidenses detenidos injustamente en Venezuela”.
Estados Unidos también podría estar interesado en obtener la extradición de Leonard Glenn Francis, un contratista de defensa de Malasia conocido como El gordo Leonard, que está acusado por un tribunal estadounidense de participación en un esquema de soborno de la Marina de Estados Unidos.
Venezuela arrestó al hombre en septiembre cuando estaba en tránsito para tomar un vuelo a Moscú.
Carstens visitó Caracas por última vez en junio del año pasado con el exembajador de Estados Unidos en Venezuela, James Story, para negociar la liberación de Matthew Heath, un exmarine estadounidense que había estado encarcelado desde septiembre de 2020.
Heath fue liberado más tarde en octubre junto con siete ejecutivos petroleros en un canje que involucró a dos miembros de la familia de Maduro encarcelados por narcotráfico en Estados Unidos.
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