La oposición de Venezuela sigue apostando a los “buenos oficios” de la comunidad internacional. Tanto así que ha sido bastante exigente con Gustavo Petro para pedirle que interceda por el proceso electoral venezolano dado el acercamiento que ha tenido su gobierno con el de Nicolás Maduro. Petro, de hecho, se volvió a reunir esta semana con Maduro. Este es el quinto encuentro que sostienen ambos mandatarios en los últimos dos años.
Y es que cuando el mandatario colombiano se refirió a la inhabilitación de María Corina Machado como algo antidemocrático, los opositores a Maduro celebraron. Sin embargo, en su reciente visita a Caracas, Petro evitó reunirse con ellos y solo lo hizo con el gobernador del Zulia y candidato presidencial, Manuel Rosales.
“Petro no se reunió con la oposición. El gobernador Rosales no representa hoy a la oposición”, dijo Corina Yoris, quien había sido designada por Machado como su sustituta a la candidatura presidencial.
En entrevista con El Tiempo, Yoris se refirió al encuentro que sostuvo el mandatario colombiano con el cuestionado gobernador del Zulia, quien asegura que inscribió su candidatura para “no dejar sin opciones a los venezolanos”.
“Nosotros no hemos sido, en ningún momento, llamados para ninguna reunión, de tal manera que él no se reunió con la oposición”, insistió Yoris sobre Petro. Para la abanderada de Machado, la oposición está formada por la Plataforma Unitaria.
Por otro lado, Yoris espera que el encuentro haya sido para pedirle a Rosales “que se acerque a la real oposición. Yo creo que sacar conclusiones es arriesgado”, sentenció Yoris.
Para Rommer Ytriago, especialista en derecho y política internacional de la Universidad Central de Venezuela, el presidente Gustavo Petro dio esas declaraciones sobre Machado “a sabiendas de que él mismo es uno de los principales líderes de la izquierda latinoamericana que en principio reclamaba ese liderazgo en torno a todos los países de esta misma cosmovisión”.
De acuerdo con el analista, las pretensiones de Petro se han quedado atrás porque la izquierda “parece mantener varios matices, como el Foro de São Paulo, y como de la Internacional Socialista. Pero, aún así, Gustavo Petro ha danzado entre lo que es el deber ser como líder democrático y lo que es la propia cosmovisión a la que está suscrito”.
En todo caso, la cuenta regresiva ya está activa. El 28 de julio, Venezuela elegirá presidente y de mantenerse el panorama actual, sin una estrategia firme de la oposición, el país se conduce a seis años más de Maduro en el poder.