Las delegaciones del gobierno de Colombia y de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) para los diálogos de paz mantuvieron total hermetismo este miércoles, cuando se celebró el tercer día de negociaciones en Caracas, luego de que manifestaran el martes sus esperanzas de alcanzar acuerdos «pronto».
Hasta el momento no se conocen detalles de lo conversado en la jornada de este miércoles, ni cuál fue la dinámica, después de que el martes en la mañana se llevaran a cabo reuniones bilaterales entre las partes y los países garantes (Venezuela, Cuba y Noruega), y en la tarde se reuniera la mesa formal de negociación.
A diferencia de días anteriores, el canal estatal VTV no ofreció información este miércoles sobre las conversaciones que se siguen celebrando en un hotel ubicado en una zona alpina de Caracas, que se mantendrán, según lo anunciado, hasta mediados de diciembre.
Fuentes relacionadas con las negociaciones no respondieron a los pedidos de información de EFE o aseguraron que no tienen, por ahora, novedades que comunicar y que cuando las haya se difundirán «oportunamente».
El alto comisionado para la Paz del país andino, Iván Danilo Rueda, dijo el martes estar «casi seguro» de llegar pronto a un acuerdo, de los tres primeros puntos, que recoge «unos asuntos básicos y urgentes» que no precisó, pero que espera dar a conocer «pronto», y que, posteriormente, se discutirán otros «más estructurales, que son de participación».
En los mismos términos, y sin aportar novedades, se manifestó este miércoles el jefe negociador de paz del ELN, Israel Ramírez, alias «Pablo Beltrán», durante una entrevista con el noticiero colombiano CM&, donde dijo espera que los diálogos que permitan acordar transformaciones urgentes que dejen sin base las causas del conflicto armado.
Cuatro años y cuatro meses después de su última reunión en La Habana, ambas delegaciones volvieron a sentarse para negociar, en medio del empeño del presidente colombiano, Gustavo Petro, de avanzar hacia la «paz total» en su país.