El colapso de los servicios básicos sigue siendo la principal razón por la que los venezolanos protestan, señala el más reciente informe del Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS).
La ONG divide en dos asuntos los motivos de las manifestaciones: Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales (Desca) y Derechos Civiles y Políticos (DCP). Del primero, que incluye falta de agua, fallas eléctricas, escasez y sobreprecio de las bombonas de gas doméstico y crisis de la gasolina, se registraron 438 protestas de 566 en total de agosto.
El servicio básico más demandado fue el del agua, con 113 protestas. Le sigue la electricidad con 85 y el gas doméstico con 49. “Las familias son obligadas a improvisar otras maneras de obtener agua: sea por tuberías ilegales, almacenando agua de lluvia o recorriendo largas distancias para obtener una fuente de agua”, dice el estudio.
Mientras que sobre las fallas de energía advierte: “Este problema afecta el desenvolvimiento de actividades domésticas, educativas, comerciales, de atención ciudadana y amenaza la vida útil de los electrodomésticos, así como la conservación de los alimentos de la familia”.
Y el problema con el gas no es solo por escasez, sino porque ahora es habitual que se aumenten las tarifas sin justificación, a pesar de que las bombonas pueden tardar semanas o meses en llegar.
En el renglón de la gasolina, el OVCS destaca que hubo en agosto muchas protestas de productores agrícolas, transportistas, personal de la salud y vecinos. En total se reportaron 92 manifestaciones. Trujillo, con 22, fue por segundo mes consecutivo el estado donde hubo más protestas, seguido de Mérida y Lara, con 15 cada uno.
También se registraron 133 protestas por derechos laborales, en especial por la exigencia de un salario digno.
Los más afectados en este ámbito son los trabajadores de la salud, que además laboran en condiciones deplorables; los del sector educativo, que piden más seguridad y mejoras de infraestructura en las instituciones; los del sector sindical, en Bolívar, que son acosados y amedrentados por el gobierno, y los productores agrícolas, quienes pierden sus cosechas por la falta de gasoil para trasladar sus productos.
Un total de 81 protestas hubo por derecho a la salud. Aquí destacan manifestaciones “de pacientes y familiares que no han podido tener acceso a trasplantes y diálisis entre otros tratamientos médicos indispensables para su calidad de vida, debido a la insuficiencia de insumos”.
Mientras que se reportaron 32 protestas para exigir vacunas contra el covid-19: “Los adultos mayores, pacientes y vecinos rechazaron el hecho de pasar largas jornadas haciendo filas para finalmente no recibir la aplicación de la segunda dosis de la vacuna, por anuncios extemporáneos y la falta de una política oficial de comunicación sobre la existencia o no de las vacunas”.