Yorman Alcides Sequera Fuentes, de 41 años de edad, recluso de la cárcel de Tocuyito, estado Carabobo, murió el sábado pasado en la Ciudad Hospitalaria Dr Enrique Tejera de esa entidad federal. Su deceso ocurrió porque presuntamente padecía tuberculosis y sepsis.
Betsaida Pineda, hermana del fallecido, informó al Obsevatorio Venezolano de Prisiones que desde febrero no lo veían.
«La cuarentena impidió que pudieramos verlo. En varias oprtunidades nos acercamos para llevarle comida pero no nos dejaron verlo», indicó.
Este lunes fue cuando a la mamá le informaron que estaba enfermo pero no le dijeron que estaba hospitalizado.
Ayer su hermana fue al centro de salud y se sorprendió al verlo, pues, asegura, no lo conocía. «Prácticamente estaba en el hueso. Ya no podía hablar«, dijo. Agregó que minutos después murió.
Carolina Girón directora del OVP, manifestó que con Fuentes son cinco los presos fallecidos este mes en Tocuyito. Los otros son Kender Javier Marín Echeverría, que falleció el 7 de junio: Wilmer José Pacheco Deni, murió el 15; Charvin José Gonzáez González, faĺleció el 19 de junio, y Orangel Rafael Chacón, que murió el 21 de este mes.
En mayo fallecieron por tuberculosis en esa cárcel Abrham de Jesús Galea y Yonaiker Leonardo González Piñero.
El OVP señala que la causa de muerte de los demás reclusos no ha sido informada por las autoridades.
Reportes del equipo del OVP en el estado Carabobo indican que a diario llevan a un grupo de presos a recibir atención medica al Hospital Enrique Tejera. La mayoría por reportes de enfermedades respiratorias avanzadas como tuberculosis, lo que hace presumir que no se están brindando los cuidados médicos necesarios en se penal ni les están dando la alimentación necesaria, indica el informe del OVP.
Familiares de otros reclusos que pidieron omitir sus identidades a fin de evitar represalias, solicitan a la nuevas autoridades de ese penal que permitan el ingreso de comida para los presos debido a que padecen un alto grado de desnutrición.
Desde que comenzó la cuarentena no permiten el ingreso de alimentos.
«Apenas reciben agua de frijoles con arroz sin sal, sin más nada», señaló uno de los familiares.
Los parientes piden que habiliten un equipo de profesionales de la salud que evalúe las condiciones en que se encuentran los presos. Además, exigen que les practiquen la prueba del covid-19 a fin de que no mueran más reclusos.