La Corte Interamericana de Derechos Humanos ratificó este martes 14 de julio las medidas de protección otorgadas hace 11 años al defensor de derechos humanos Humberto Prado. Además, decidieron ampliarlas a los integrantes de su grupo familiar debido al hostigamiento y las amenazas que reciben del régimen de Nicolás Maduro.
La CIDH tomó la decisión pese a que el Estado solicitó que las medidas fueran levantadas.
En 2014 inició una campaña de ataques y desprestigio en contra de Humberto Prado y su entorno. Entre 2015 y 2020 hubo más de 20 señalamientos en su contra en medios públicos, especialmente en el programa Con el mazo dando, conducido por Diosdado Cabello en VTV.
A esto se le suman acciones de hostigamiento en aeropuertos venezolanos, intervención y exposición pública de comunicaciones privadas y amenazas de invalidación de documentos de identificación.
El alcance del hostigamiento constante también afectó a Carolina Girón, esposa del también comisionado presidencial para los Derechos Humanos, quien ha sido víctima de vigilancia en su lugar de residencia y persecución, además de ser acusada sin prueba alguna por Cabello, el 26 de octubre de 2016, de tener una compañía en Panamá dedicada a la compra-venta de material bélico.
Estas medidas provisionales fueron otorgadas en 2009 y reiteradas en 2011, 2012 y 2015. En ellas se exhorta al Estado venezolano a que adopte las medidas necesarias para proteger la vida e integridad personal de Humberto Prado y poner fin a todo tipo de hostigamiento y campaña de desprestigio en su contra.
La CIDH determinó que la situación de riesgo del defensor sigue vigente.
«Las medidas provisionales deben permanecer en vigencia en tanto la corte considere que subsisten los requisitos básicos de extrema gravedad y urgencia y la prevención de un daño irreparable a los derechos de aquellos protegidos por tales medidas», señaló el documento.