Dos trenes chocaron en la estación Petare del Metro de Caracas durante la tarde del miércoles. Las imágenes difundidas en las redes sociales mostrarían que los usuarios fueron desalojados de las unidades mientras los trabajadores solventaban la situación.
“Debe ser que venía empalomado (sumamente rápido) de verdad”, se escuchó decir a una mujer en un video publicado en Twitter.
En una foto se observa cómo quedaron los trenes. Uno de ellos con el acople hacia arriba, visiblemente afectado. Según los reportes en la red social, las unidades no iban a alta velocidad y se aseguró que ninguna persona resultó lesionada.
Las razones de este accidente no se conocen y la compañía estatal de transporte, como sucede con frecuencia, no informó sobre lo ocurrido. Sin embargo, Luis Román, secretario ejecutivo de la asociación civil Familia Metro, explicó a El Nacional los motivos por los cuales habría ocurrido la situación.
¿Qué ocurrió, según el experto?
Según el experto, aparentemente los trabajadores estaban haciendo un procedimiento de acople para el empuje o remolque de un tren que no tenía propulsión. Eso, según la estrategia que establecían el Centro de Control de Operaciones y el personal que estaba en la vía coordinando el movimiento hacia un estacionamiento.
«En este evento en particular hubo fallas tanto del CCO como del personal que estaba en la vía haciendo las acciones para el acoplamiento de los dos trenes. Es posible que no hicieron el acople con precaución; a la vista no utilizaron una velocidad acorde para hacer el acople, que es menos de 10 kilómetros y se produjo ese choque», explicó.
Señaló que se trató de «un choque de menor magnitud» que no se compara con el que ocurrió el 30 de julio de 2007 entre las estaciones Plaza Sucre y Gato Negro. Ese día hubo un fallecido y 14 lesionados. «Eso sí fue un choque, esto fue un ‘golpecito’, pero evidentemente hubo error humano porque, para hacer ese procedimiento, se neutralizan ciertos controles que impiden el acercamiento de un tren con el otro para, precisamente, hacer el empuje o remolque», añadió.
El director de Familia Metro, fundada en 2003 por trabajadores, extrabajadores y jubilados, afirmó que los procedimiento internos se violentan o no se aplican de la forma correcta. Y señaló la falta de orientación y formación del personal operativo, tanto en las estaciones como en el manejo de trenes, así como de quienes trabajan en el Centro Operacional de Operaciones.
«La amenaza de un accidente grave»
Usuarios en Twitter manifestaron su preocupación por la posibilidad de que el en sistema ocurra un accidente grave. Otros expresaron rechazo porque, presuntamente, a la compañía se han incorporado personas que no tienen el conocimiento ni la preparación.
«La amenaza de un accidente grave en el Metro sigue estando vigente», «usar el Metro de Caracas es suicidarse», «en cualquier momento surge la desgracia y los rojos (chavistas) ni bolas le pararán», «Trenes con fallas, sin aire, sin comunicaciones, sin operadores bien capacitados, menos mal circulan a mínima velocidad porque las vías no sirven y las ruedas de los trenes están deformadas», comentaron algunos.
«Qué desastre. Dios metió su mano para que no pasara a desgracia. Siguen metiendo gente sin capacitación, sin experiencia. ¡Viva (el plan de gobierno) Chamba Juvenil, pues!», ironizó otra persona.
Luis Román ingresó al Metro de Caracas en mayo de 1982 y formó parte del grupo de los pioneros, así llamados por el ingeniero José González Lander, fundador de la Compañía Anónima Metro de Caracas. Se desempeñó, en su último cargo, como supervisor de torre de control en las Líneas 1 y 2 del sistema.