Hace siete meses, el 8 de agosto de 2020, el sociólogo y exguerrillero Carlos Lanz salió de su casa en Maracay, estado Aragua y, desde entonces, continúa desaparecido.
La desaparición, catalogada como forzosa por su esposa Mayi Cumare, la reportó su hijo, Álex Sanz, quien detalló en ese entonces que no sabían nada del también profesor y arqueólogo. Lo último que supieron de él fue que se conectó por última vez en Twitter a las 9:45 am del 8 de agosto de 2020.
Lanz sigue desaparecido a pesar de que una semana después de la denuncia de sus familiares el fiscal general del régimen de Nicolás Maduro, Tarek William Saab, anunció su búsqueda. Saab asignó una comisión mixta conformada por el Cicpc, Conas y Sebin para el caso.
En ese entonces señaló que los uniformados se encargarían de investigar y esclarecer el suceso. Sin embargo, siete meses después, sigue sin conocerse su paradero.
Pocos días después de su desaparición, el 12 de agosto de 2020, su esposa se manifestó al respecto. Reveló que a su esposo lo obligaron a desaparecer porque él “representa un obstáculo en el camino torcido de muchos”.
Afirmó que las razones por las que desapareció fueron políticas y pidió que no se tergiverse la verdad de su caso. Manifestó, sin referirse directamente a alguna autoridad del régimen, que Lanz tenía tiempo pensando y reflexionando demasiado. Aseguró que eso no le convenía a quienes se oponían a la construcción de sus ideas.