El estado Barinas, en el que nació Hugo Chávez, vivió este jueves el cierre de una inusual campaña a la gobernación marcada por un ambiente enrarecido, solo animado por el gran acto que celebró el candidato oficialista Jorge Arreaza.
Los comicios suponen una polémica repetición ordenada por la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que anuló los resultados el 21 de noviembre de 2021, cuando el opositor Freddy Superlano derrotó al entonces aspirante a la reelección, Argenis Chávez, hermano del hombre que presidió Venezuela desde 1999 hasta su muerte en 2013.
Arreaza, que aspira a romper la racha de gobernadores de apellido Chávez que han regido Barinas desde 1998, celebró un gran acto de cierre de campaña en el que, tratando de dejar atrás su imagen de hombre de escaso carisma, se animó a cantar música popular.
Durante el acto, afirmó haber recorrido los 12 municipios que tiene el estado para conocer sus problemas y tratar de resolverlos si gana las elecciones.
El candidato chavista, que estuvo casado una década con una hija del fallecido presidente, apeló a los recuerdos familiares y afirmó que han encontrado la forma de descifrar la «trampa mortal» que, según su versión, EE UU puso a la economía venezolana y, por tanto, pronosticó que este año será de crecimiento.
El oficialismo augura la victoria
«Ya el bloqueo no va a impedir el desarrollo de Venezuela, ya lo dicen los números, hasta los economistas opositores tienen que decirlo, la economía va para arriba (…) y Barinas no se va a quedar atrás, tiene que estar en la punta de lanza», afirmó en referencia a las sanciones impuestas por EE UU.
El candidato y excanciller llamó a sus simpatizantes para que traten de seducir a sus parientes que votan tradicionalmente por la oposición y, en esta repetición electoral, opten por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Durante el acto, también tomó la palabra el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, quien afirmó a los militantes que «la derecha no a va a gobernar a Barinas» después de los comicios de este domingo y auguró una victoria de Arreaza a quien definió como «revolucionario, antiimperialista, socialista y profundamente chavista».
Una caravana opositora
El candidato de la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Sergio Garrido, que sustituyó a Superlano al afirmar el TSJ que este está inhabilitado, organizó una caravana de motos para su acto final de campaña.
Poco antes, estuvo también en la localidad de Pedraza, que calificó como «un ejemplo de valentía y coraje», así como «un municipio emblemático» para los habitantes de la región que «respaldan el cambio» en el gobierno regional.
«Los barineses estamos cargados de mucha dignidad para defender lo que es nuestro. Nuestra querida Barinas, caminos de palma y sol», afirmó.
Hasta el momento, no se conoce la razón de la inhabilitación de Superlano, ya que, en agosto de 2020, el gobierno le otorgó, junto a otras 109 personas, una medida de gracia que contemplaba el levantamiento de cualquier bloqueo que le impidiera desempeñar cargos públicos y desarrollar labores políticas.
No obstante y debido a esa decisión del TSJ, Garrido encabeza la candidatura de la MUD, para la que recibió el respaldo de quien fue el aspirante ganador el 21 de noviembre pasado.
Sobre la participación de Claudio Fermín
El tercero en discordia en estos comicios es Claudio Fermín, considerado como un disidente de la oposición por el bloque mayoritario del antichavismo, que lo acusa de haberse vendido y presentarse para dividir a los votantes.
En el último día, Fermín replicó indirectamente esas acusaciones al afirmar que su candidatura «no está encerrada» ni «enclaustrada en un pequeño grupo», la crítica más habitual que recibe el liderazgo opositor.
«No es una candidatura de cogollos ni que obedezca a una visión estrecha, sino que está respaldada por sectores distintos, diversos, de la colectividad. Partidos de la Alianza Democrática, partidos emergentes independientes y partidos que antes apoyaban a la MUD y ahora decidieron respaldarnos», destacó el aspirante, según recoge un comunicado de su equipo.
La última palabra tras el infrecuente cierre electoral la tendrán este domingo los barineses, en unas elecciones que no contarán con observación internacional, lo que ha generado numerosas suspicacias entre los posibles votantes del resto de Venezuela.