El Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) de Panamá negó el lunes el presunto hallazgo de una fosa común con cadáveres de migrantes venezolanos en la selva del Darién, tal y como se dio a conocer en diversos medios de comunicación.
El organismo aclaró en Twitter que se trató de un malentendido e informaron que las cifras que manejan es que a lo largo de 2022 se han registrado 18 fallecimientos de migrantes de diversas nacionalidades, cinco de ellos por inmersión y otros 13 por causas desconocidas.
Medios de comunicación reseñaron el lunes más temprano que las autoridades panameñas habían encontrado a 18 venezolanos fallecidos enterrados en la densa selva del Darién, limítrofe entre Colombia y la nación centroamericana.
Manejaban la hipótesis de que esos connacionales migrantes pudieron ser víctimas de los llamados coyotes, quienes pudieron haberles engañado, quitado sus pertenencias y asesinado. Sin embargo, la información fue desmentida por Senafront.
Durante una entrevista a un medio televisivo realizada el pasado 6 de septiembre, el director del Senafront, Oriel Ortega, detalló que de los migrantes fallecidos en el Darién en lo que va de año tres son de nacionalidad venezolana.
Hasta agosto la cifra total de migrantes que cruzaron la selva del Darién superó las 100.000 personas. De ellas, una gran mayoría, que representa 70%, son venezolanos.