El candidato presidencial del mayor bloque opositor de Venezuela, Edmundo González Urrutia, dijo este jueves que aspira a liderar una transición sin exclusión en caso de ganar las elecciones del 28 de julio, en las que se enfrentará a nueve rivales, entre ellos Nicolás Maduro.
«A partir del 29 de julio es necesario que comencemos a trabajar en un cambio de gobierno ordenado y pacífico, que nos permita iniciar una transición real y duradera, donde todas las fuerzas políticas, incluyendo a las que apoyan al actual gobierno, puedan ejercer sus derechos en el marco de la Constitución», dijo el exembajador en su primer mensaje de campaña, que arrancó este miércoles y se prolongará hasta el 25 de julio.
Señaló también que como eventual comandante en jefe de la Fuerza Armada se compromete a dirigir la institución militar en «su papel fundamental» como un cuerpo profesional y sin militancia política -como recoge la Constitución-, a diferencia de Maduro, que asegura que los uniformados son «profundamente chavistas».
«La Fuerza Armada tiene el deber de respetar la voluntad del pueblo manifestada en las urnas de votación y estoy seguro de que lo cumplirá», subrayó González.
Edmundo González: «Nos toca mantenernos firmes y vigilantes»
Considera también que un cambio político en Venezuela, gobernada por el chavismo desde 1999, «necesitará estructuras y alianzas» que podrán reforzarse en 2025, cuando se prevén elecciones de un nuevo Parlamento -actualmente controlado por el chavismo-, así como de gobernadores y alcaldes.
«Nos toca mantenernos firmes y vigilantes de una ruta electoral que será clave para renovar el mandato de autoridades que se comprometan con la democracia, la justicia y la paz», aseveró.
Indicó que la «reinstitucionalización» del país «es prioritaria para dar fundamento a los programas sociales en favor de los más vulnerables, sin ningún tipo de discriminación política».
«Ni discriminación, ni persecución, eso es justicia social», añadió González, que prometió -entre esa «restitución de derechos»- salarios, jubilaciones y pensiones «justas», así como inversiones en servicios públicos.
«Asumo el compromiso de conducir a Venezuela para convertirla en un país donde todas las personas podamos progresar en paz y con libertad, y para ello cuento con todas las venezolanas y todos los venezolanos, y ustedes cuentan conmigo», expresó.