VENEZUELA

Arreaza criticó a la ONU por no tomar medidas ante las sanciones de EE UU contra funcionarios venezolanos

por Avatar EFE

El canciller del régimen de Nicolás Maduro, Jorge Arreaza, rechazó ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU las sanciones de Estados Unidos contra funcionarios venezolanos y las calificó como terrorismo económico.

Arreaza también criticó a la ONU y a la comunidad internacional por no tomar medidas contra esta práctica.

«El Departamento del Tesoro de Estado Unidos es un pentágono económico que comanda esta guerra. Una contra centenares de millones de seres humanos ante la inacción del sistema multilateral», señaló Arreaza en su intervención en el Consejo.

También acusó a Naciones Unidas de no responder al llamado de Nicolás Maduro. El oficialista pidió el mes pasado al organismo multilateral ayuda para romper el bloqueo petrolero estadounidense contra Venezuela.

«Le corresponde a la ONU, al sistema multilateral y a este augusto Consejo liderar una contención humanitaria urgente e impostergable contra la masiva violación de los derechos humanos que representan esas sanciones», afirmó.

Arreaza calificó como medidas coercitivas unilaterales las acciones del gobierno de Estados Unidos hacia Venezuela. Lamentó que no fueran mencionadas el lunes por el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres.

Señaló que el bloqueo causó que los ingresos nacionales por la exportación de petróleo se redujeran de 42.000 millones de dólares en 2013 a 4.000 millones en 2018. Esta medida ocasionó pérdidas en el país de más de 120.000 millones de dólares.

«Han impulsado un fenómeno migratorio e inédito», subrayó.

El canciller recordó que el régimen presentó el pasado 13 de febrero una solicitud ante la Corte Penal Internacional en La Haya para que investigue si las sanciones constituyen un delito de lesa humanidad.

«Ha llegado la hora de frenar la plutocracia norteamericana. Esa, que atenta contra la convivencia pacífica, los derechos humanos y la vida de millones de personas en el mundo entero», concluyó Arreaza.