VENEZUELA

Análisis de entorno:  El chavismo ya cumplió su etapa y debe dar pie a una nueva

por Avatar Benjamín Tripier

La híper exposición mediática nacional e internacional que están teniendo figuras como Nicolás Maduro, Diosdado Cabello y Delcy y Jorge Rodríguez dejan a la vista no solo lo textual de los mensajes en términos de frases y palabras, sino las referencias y también la gestualidad, los énfasis y el perfil de los rostros, los cuales posiblemente dicen más que el mensaje que intentan transmitir: son mensajes que dicen menos que lo que insinúan.

En cada caso la oportunidad del mensaje tiene un propósito, ya sea contrarrestando condiciones adversas del entorno, ya sea adicionando cuotas de miedo y de terror que responden a un plan sistemático de destrucción emocional de los opositores, y de mensajes a la comunidad internacional de que están dispuestos a todo para retener el poder. 

Pero los verdaderos destinatarios del mensaje son los menos de 3 millones de votantes para asegurarles que algo similar o peor podría ocurrirles si no se apegan al discurso de que ellos ganaron la elección. 

Pareciera que el sustrato de los mensajes, especialmente de Maduro, tiene que ver con traición y ruptura de confianza que viene desde adentro, usando palabras asociadas a maldad para caracterizar a los sujetos de su temor. Que siempre son gente propia que en algún momento estuvieron muy cerca de él. Ve maldad en los que lo adversan y no en las brutalidades de torturar menores y mujeres, que su propia gente lleva a cabo a través de los grupos de tortura organizada que manejan desde el alto gobierno. “Cuidado con la envidia te clavan la puñalada por la espalda”, dijo en algunos casos.

A ese énfasis en el tema de la traición habría que relacionarlo con la situación interna del chavismo, pues que todos están ahí con el “cuchillo entre los dientes”; y si bien los cuatro jefes mencionados tienen un acting bien preparado que no muestra debilidad, algo muy diferente ocurre con la siguiente línea de mando y hacia abajo, donde todos temen que algo malo pueda pasarles si muestran algún tipo de duda. Hoy todos tienen miedo y por eso se callan… lo cual genera la debilidad de poder tener al lado a un nuevo enemigo, y que por temor oculta sus sentimientos. Hoy lo que se vive ahí adentro es de terror. 

Los invito a ver cualquiera de los actos que nunca son a cielo abierto sino que son en lugares cerrados con muy altos niveles de control y seguridad. Las caras de los participantes no muestran expresiones, los aplausos son forzados, así como las risas que más bien parecen rictus que dejan ver que las cosas han cambiado.

Porque el tema de los resultados electorales (así como pasó en diciembre pasado con el referéndum del Esequibo) ha hecho mucho daño a lo interno, porque todos saben que perdieron y tienen que mantener una mentira. Lo cual afecta negativamente cualquier expresión de liderazgo y de capacidad para creer y aceptar genuina. Hoy el daño emocional al interior del chavismo es muy profundo así no lo digan, y así tengan que seguir sosteniendo que ellos ganaron la elección. 

Para la base de su movimiento, ese no es el chavismo que conocieron y que era el objeto de su apoyo y devoción. Para ellos, de cara adentro, primero pasaron al desencanto y la desilusión, luego pasaron a la negación, y finalmente al rechazo, el cual pocas veces es público (por miedo a expresarse) y casi siempre es privado… no los quieren y hasta los repudian, pero solo lo manifestarán cuando ya sea tarde para frenar cualquier movimiento que seguramente ya está en marcha. Por eso se dice que cualquier cambio vendrá desde adentro.

El tema del líder carismático que en este momento necesitaría la revolución se acabó y ahora están descansando sobre una base que no pueden ver. De ahí la insistencia en el discurso de la traición, del miedo a que lo ataquen; Maduro habla de la “violencia en mi contra; violencia física que es precedida por la violencia del lenguaje”.

Y cuando dicen que la oposición es odio, intolerancia, división y violencia, seguramente se está refiriendo a su propia gente; a que, perfectamente, se podría decir que el chavismo, en este momento es odio, intolerancia, división y violencia.  Todo lo que dicen en contra de la oposición es una confesión de lo que ellos mismos padecen.

El evento conmemorativo del fallecimiento de Robert Serra, que fue en vivo, le sirvió para recordar que las fracturas internas del chavismo empezaron ya hace tiempo. Lo llamativo es que el peso se lo llevó el tema de la generación de oro (que así la llaman ellos) trayendo al presente las ideas de Chávez (y de Robert Serra), lo cual sería totalmente imposible en el contexto de la Venezuela de Maduro. Porque cualquier idea de Chávez se diluye en la realidad que tenemos hoy:  la revolución ya no es la revolución que fue con Chávez… porque nada de lo que está pasando es coherente con las ideas originarias del chavismo.

Porque lo que sí es cierto, es que el chavismo ya cumplió su etapa y que debe dar pie a otra nueva, y esa nueva ya no puede incluirlos porque ellos mismos fueron cultivando el gen de su propia destrucción… por eso, su salida del poder, es un hecho… y solo es una cuestión de tiempo… y ese tiempo solo está asociado a la capacidad de reprimir… y eso no es sostenible sin dinero, con el repudio popular y con militares que no están contentos con las mentiras.

Y también hay que estar claros en que esa capacidad destructiva no está apoyada en bases sólidas… no son ni Corea del Norte o Nicaragua… y ni siquiera son Cuba… son la etapa final de un proceso de aprendizaje y de crecimiento social que nos costó, y sigue costando, muy cara en términos de sufrimiento y sacrificio de un pueblo bueno y feliz que no se merecía que lo trataran de esta forma… triste… muy triste, pero cierto.

Político

Es difícil que el gobierno logre que se traspase el foco de atención sacándolo de la elección presidencial y lo coloque en las elecciones generales del 2025. Es muy difícil que se pueda hablar de política entre el gobierno y la oposición sin que se acuerde una transición ordenada para que entreguen el 10 de enero próximo.

Adentro y afuera del país no hay dudas de que Maduro perdió las elecciones a manos de Edmundo González, pese a que adentro, por la censura y la represión, y pese a que todos lo saben, son pocos los que lo dicen. Mientras afuera del país, todos (claro, menos los cuestionados Nicaragua, Cuba, China, Rusia e Irán) saben y asumen formalmente que Maduro perdió… y que Edmundo González le ganó… “por paliza” como dicen en el sur.

Dentro de Venezuela se vive una tensa calma -la paz de los cementerios- donde nadie se anima a levantar la cabeza, porque el gobierno ha mostrado que es capaz de cualquier cosa con tal de no entregar el poder: “lo retendremos a cualquier costo”.

La entrega del gobierno por parte de Maduro el próximo 10 de enero de 2024 parece incierta, dado el contexto actual de Venezuela. Aunque Maduro ha reafirmado su intención de juramentarse para un nuevo período presidencial (2025-2031), su reelección sigue siendo ampliamente disputada tanto a nivel nacional como internacional debido a las denuncias de fraude y falta de transparencia en el proceso electoral. Hasta ahora, el Consejo Nacional Electoral no ha publicado los resultados completos de las elecciones de julio de 2024, lo que ha aumentado la desconfianza sobre la legitimidad del proceso.

La oposición, liderada por figuras como María Corina Machado y Edmundo González Urrutia, ha expresado su deseo de lograr una transición pacífica, pero la situación sigue siendo volátil. Los escenarios más probables incluyen la continuación del mandato de Maduro, especialmente con el respaldo de actores clave como las fuerzas armadas y las milicias civiles. 

Sin embargo, algunos expertos sugieren que podría ocurrir un cambio solo si se producen fracturas dentro del propio chavismo gobernante, o si la presión internacional y las sanciones logran debilitar significativamente su poder.

En resumen, aunque hay deseos de cambio por parte de sectores de la oposición y la comunidad internacional, es poco probable que Maduro entregue el gobierno el 10 de enero de 2024, a menos que haya un colapso interno o se negocie una transición.

La presentación de las actas electorales por parte del Centro Carter en la OEA ha generado un impacto importante en el panorama político venezolano. Estas actas, que según la organización demuestran la victoria del candidato opositor Edmundo González Urrutia en las elecciones del 28 de julio, contradicen los resultados oficiales que declararon ganador a Nicolás Maduro con 51,95% de los votos.

El Centro Carter afirmó que el proceso electoral venezolano careció de transparencia, en particular por la negativa del CNE a hacer públicas las actas originales de las elecciones. La presentación de estos documentos en la OEA refuerza las acusaciones de fraude por parte de la oposición venezolana, que sostiene que su candidato, González Urrutia, obtuvo más de 60% de los votos. 

La acción del Centro Carter ha aumentado la presión internacional sobre el gobierno de Maduro, generando una respuesta enérgica por parte de su administración, que ha desestimado las acusaciones y señalado que las actas no tienen validez oficial. Sin embargo, varios países y organismos internacionales continúan demandando mayores garantías democráticas en Venezuela, lo que podría complicar aún más el clima político del país en los próximos meses.

Foto: Federico PARRA / AFP

Social

Una de las dimensiones sociales que menos se ha tenido en cuenta es la de la emocionalidad y la salud mental del venezolano; que está íntimamente relacionada con el entorno y cómo influye sobre la persona, y cómo la persona impacta sobre ese entorno. De esa interacción asimétrica es que surge que el peso del entorno termina influyendo sobre la persona y que son pocas las personas que tienen la capacidad de influir y transformar el entorno. 

Vamos a pensar que las personas que influyen sobre el entorno asumen posiciones de liderazgo el cual puede ser liderazgo positivo o liderazgo negativo. Para este caso consideramos liderazgo negativo el que está asumiendo el gobierno con amenazas, con castigos, con torturas y con una especie de vandalismo institucional; y liderazgo positivo el que está asumiendo la oposición en las cabezas visibles de María Corina Machado y Edmundo González Urrutia.

Porque son la fuente de esperanza que es la contrapartida o el contrapeso de la fuente de negatividad, asumida por el gobierno -el chavismo- por la mala vida a la que están sometiendo al país.

Un estudio que preparó la Universidad Católica Andrés Bello, llamado Psicodata 2024, se coloca en el lado de la gente que es asimétricamente dependiente del entorno o dicho de otra forma gente que es altamente influida por las condiciones del entorno. Una conclusión importante de este estudio es que nueve de cada diez venezolanos “presenta algún grado de vulnerabilidad como un retrato de la situación psicosocial de la población de Venezuela”. 

“El miedo difuso colectivo la desesperanza y la desconfianza, el poco apoyo social percibido de instituciones públicas, la ansiedad y depresión, la poca asistencia al psicólogo o psiquiatra, además de estresores como la situación económica y de salud, se cuentan entre los factores que están impactando negativamente a los habitantes del país”.

Pero del otro lado este mismo estudio “muestra la resiliencia ante un entorno altamente negativo y estresante porque aun en estas terribles condiciones, se perciben optimistas, y dicen contar con la familia en momentos difíciles; también se apoyan en la religiosidad, sienten que tienen control personal, quieren participar en actividades sociales y se encuentran satisfechos con su propia vida”.

En el segundo semestre de 2024, Venezuela enfrenta una situación psicosocial compleja marcada por altos niveles de vulnerabilidad y desafíos en salud mental. Aproximadamente 90% de la población presenta algún grado de vulnerabilidad psicosocial, reflejada en síntomas de ansiedad, depresión y estrés. Esto se vincula principalmente a la crisis económica y las dificultades sociales que afectan la vida cotidiana.

Indicadores de malestar psicológico muestran que cerca de 49% de los venezolanos ha perdido el sueño debido a preocupaciones, y 36% se siente constantemente agobiado y tenso. Además, 31% reporta sentirse deprimido o infeliz. Las mujeres parecen estar más afectadas que los hombres, con 23% mostrando síntomas de ansiedad y depresión frente a 16% de los hombres. Regionalmente, estados como Zulia y el Oriente del país registran los mayores niveles de malestar mental.

El estrés económico es el principal factor de preocupación, reportado por 47% de la población, seguido por problemas de salud y personales. Sin embargo, pese a estos desafíos, menos de 10% de la población ha acudido a un psicólogo o psiquiatra, lo que indica barreras de acceso significativas, como los altos costos de atención y el estigma social.

A pesar de estas dificultades, la resiliencia social sigue siendo un factor importante. La familia y la religión son fuentes clave de apoyo para la mayoría de los venezolanos, con 88% sintiendo respaldo familiar y 85% participando activamente en prácticas religiosas, lo que sugiere una fuerte red de apoyo emocional en momentos de crisis

A pesar de las dificultades, como los altos niveles de estrés relacionados con la economía y la salud, el venezolano mantiene una actitud de afrontamiento positivo. 61% de los encuestados busca siempre el lado positivo de las situaciones, utilizando el humor y el optimismo como mecanismos para manejar el estrés 

Este enfoque muestra que, aunque las condiciones materiales son duras, la fortaleza emocional de la población se sostiene en el apoyo mutuo y la capacidad de encontrar luz en las situaciones más difíciles.

Además, la participación social sigue siendo un factor relevante. Aunque la confianza en las instituciones públicas es baja, el interés en actividades recreativas, espirituales y sociales sigue siendo alto, con 80%-85% de la población dispuesta a participar en actividades que refuercen su bienestar emocional y social.

Ojo… participar en todo menos en política, porque solo 16% manifestó interés en participar en actividades políticas. Porque hay que estar claros en que la masa gigantesca de gente que sigue a María Corina Machado no la sigue por ser política sino por representar la esperanza de una vida mejor.

Económico

Las condiciones en las que se emitió la GL41 están asociadas a una renovación automática cada tres meses y a la posibilidad de que, sin previo aviso y en cualquier momento, pueda ser revocada. Lo cual quiere decir que la información de la renovación de la GL41, si bien responde a la presión del lobby de Chevron en las instancias de la Casa Blanca, hay que decir que sigue en estudio -como si la renovación no hubiera existido- el tema de actualización de las sanciones, siempre esperando a que el gobierno del chavismo de alguna señal que pudiera evitar que la respuesta de la Casa Blanca fuera de sanciones más fuertes que las que hoy se despliegan sobre Venezuela; incluyendo suspender la mencionada GL41. 

Nuestra economía sigue altamente dependiente del petróleo y los montos que aporta Chevron al mercado interno, si bien comparativamente son muy inferiores a los que en el pasado aportaba el petróleo a la economía, siguen siendo la contribución más importante para la disminuida economía que hoy tenemos. 

Si perdiéramos a Chevron el golpe a la economía sería muy fuerte considerando que el proceso recesivo post 28 de julio se ha ido profundizando pese a que aún siguen activos y se sigue contando con esos ingresos. Por lo cual si no contáramos con ese ingreso petrolero no solo el país profundizaría su crisis recesiva, sino que la revolución perdería la fuente de financiamiento que mantiene activo el brutal sistema represivo del estado.

En el segundo semestre de 2024, la situación económica de Venezuela sigue caracterizada por una leve recuperación impulsada principalmente por la producción petrolera, a pesar de los desafíos económicos y las sanciones internacionales. Durante este periodo, el PIB venezolano ha mostrado un crecimiento notable del 8,78% en el segundo trimestre de 2024, continuando una tendencia positiva desde 2021. Este crecimiento se debe tanto a un aumento de 11,08% en el sector petrolero como a un incremento de 6,58% en sectores no petroleros, como las finanzas, la construcción y la manufactura.

En cuanto a las exportaciones petroleras, en agosto de 2024 se registraron los niveles más altos en cuatro años, con un promedio de 852.000 barriles diarios. Esto fue favorecido por la flexibilización de las sanciones de EE UU, lo que mejoró las condiciones de exportación, especialmente hacia mercados en Asia y Europa. El petróleo sigue siendo el motor de la economía venezolana, con exportaciones proyectadas para cerrar 2024 en aproximadamente 20.405 millones de dólares.

En el ámbito del comercio exterior, se espera que las exportaciones totales del país cierren el año 2024 en cerca de 20.241 millones de dólares, un leve aumento comparado con 2023. Las importaciones también han aumentado significativamente, con un crecimiento proyectado de 15% respecto al año anterior, alcanzando alrededor de 12.752 millones de dólares.

En resumen, aunque persisten problemas estructurales, el país experimenta una lenta recuperación económica liderada por el sector petrolero y el alivio de sanciones que han permitido un mayor flujo de divisas.

Israel

Durante las últimas semanas, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han lanzado ataques en distintos puntos de Medio Oriente. Getty Images

Internacional

La posibilidad de una guerra entre Israel e Irán ha sido objeto de especulación durante años debido a la rivalidad geopolítica y las tensiones relacionadas con el programa nuclear iraní. Sin embargo, si bien el riesgo de conflicto sigue presente, varios factores influyen en la probabilidad de una guerra abierta entre estos dos países.

Israel considera el programa nuclear de Irán como una amenaza existencial, y ha expresado su disposición de usar la fuerza para evitar que Irán adquiera armas nucleares. En 2023 y 2024, las tensiones han aumentado debido a las sospechas de que Irán está cerca de obtener la capacidad de producir armas nucleares, lo que podría desencadenar una respuesta militar israelí​.

Hasta la fecha, Israel ha llevado a cabo operaciones encubiertas y ataques aéreos contra objetivos iraníes en Siria, donde Irán ha establecido una presencia militar significativa. Sin embargo, estos enfrentamientos se han mantenido en un nivel bajo de intensidad. También se han reportado ciberataques y sabotajes en instalaciones nucleares iraníes, presuntamente realizados por Israel, lo que reduce la necesidad de un conflicto directo.

Tanto Israel como Irán tienen poderosos aliados en la región y en el ámbito internacional. Israel cuenta con el respaldo de Estados Unidos, que ha dejado claro que no permitirá que Irán obtenga armas nucleares. Por su parte, Irán tiene el apoyo de grupos como Hezbolá y vínculos con Rusia y China, lo que hace que cualquier conflicto regional pueda tener consecuencias globales, algo que tanto Irán como Israel buscan evitar.

A pesar de la retórica belicista, existen esfuerzos diplomáticos para reducir las tensiones. Las negociaciones sobre el acuerdo nuclear iraní (JCPOA) continúan, aunque con dificultades. Estados Unidos y la comunidad internacional siguen presionando por una solución diplomática, lo que podría des escalar la situación si se alcanzan compromisos.

En resumen, aunque las tensiones entre Israel e Irán siguen siendo altas, por el momento parece más probable que continúen los enfrentamientos indirectos y las acciones encubiertas, en lugar de una guerra abierta a gran escala. La situación dependerá en gran medida de cómo evolucionen los programas nucleares iraníes y los esfuerzos diplomáticos.

Cualquier día de estos podemos despertarnos con la noticia de que estos dos países entraron en guerra, llevando al mundo a la realidad de un nuevo eje que sería Moscú-Teherán, y de este lado, nuevamente los aliados liderados por EEUU.

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