La Asamblea Nacional, electa en 2020 y controlada por el chavismo, suspendió la sesión prevista para el martes que tenía en agenda la aprobación de la polémica ley «contra el fascismo», término acuñado a la oposición y que críticos ven como un medio para incriminar detractores del gobierno.
El texto forma parte de un paquete de leyes solicitadas por Nicolás Maduro, que denuncia un intento de golpe de Estado en su contra, en medio de cuestionamientos a su reelección para un segundo mandato de seis años, hasta 2031.
«Me dirijo a ustedes siguiendo instrucciones del diputado Jorge Rodríguez Gómez, presidente de la Asamblea Nacional, en la oportunidad de informarles la suspensión de la sesión extraordinaria«, dice un mensaje a los diputados de la secretaria del Parlamento, María Alejandra Hernández, que fue reenviado a la prensa el lunes en la noche.
No es la primera vez que el Parlamento suspende una sesión en el último momento. No se fijó aún la fecha del debate.
La «Ley contra el fascismo, neofascismo y expresiones similares» incluye la ilegalización de partidos y multas de hasta 100.000 dólares para empresas, organizaciones o medios que financien actividades o difundan información que «incite al fascismo».
Su aprobación es segura cuando el chavismo lo disponga: tiene 256 de los 277 escaños del Parlamento, luego de que la oposición boicoteara las elecciones legislativas de 2020.
La semana pasada, la Asamblea aprobó una ley para regular lasONG, también muy criticada por activistas. El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos había pedido a las autoridades frenar la aprobación de «leyes que socaven el espacio cívico y democrático».
El Parlamento tiene previsto también legislar sobre redes sociales, que Maduro asegura son usadas para generar violencia y lanzar «campañas de odio».
Maduro ya suspendió la red X en el país y promueve un boicot contra WhatsApp.
Maduro fue proclamado ganador de los comicios del 28 de julio con 52% de los votos, pero la oposición liderada por María Corina Machado reivindica la victoria de su candidato, Edmundo González Urrutia, y asegura tener evidencia de su triunfo.
Al conocerse el resultado del CNE, estallaron protestas a lo largo del país con balance de 25 muertos, casi 200 heridos y más de 2.400 detenidos, que Maduro tacha de «terroristas».