Un alto funcionario del gobierno de Joe Biden viajó discretamente a Venezuela en diciembre para visitar a los estadounidenses que continúan presos bajo el régimen de Nicolás Maduro. Las autoridades norteamericanas tratan de recuperar al resto de sus ciudadanos, acusados por la justicia chavista de terrorismo y otros delitos.
La información la publicó la cadena de noticias CNN, que indicó que se trató de Roger Carstens, enviado presidencial especial para Asuntos de Rehenes del Departamento de Estado. En ocasiones anteriores, el diplomático ha estado en conversaciones personales con el chavismo y se ha reunido con los norteamericanos.
Ni las autoridades de Venezuela ni las del gobierno de Biden han confirmado el viaje hasta la fecha, pero se conoció que a Carstens lo acompañaron funcionarios consulares. En el país, siguen bajo custodia Luke Denman y Airan Berry, señalados de participar en la Operación Gedeón; y de Eyvin Hernandez y Jerrel Kenemore, a quienes Estados Unidos considera que están detenidos injustamente.
Henry Martínez, hermano de Hernández, dijo a CNN que Carstens entregó algunos dulces de parte de la familia, como miel y chocolate, además de vitaminas y jabón. “Pudieron decirle que están trabajando en su liberación y que no se han olvidado de él”, aseguró.
Siete estadounidenses liberados
En octubre del año pasado el régimen de Venezuela liberó a siete estadounidenses presos a cambio de los dos sobrinos de Cilia Flores, procesados en Estados Unidos por narcotráfico.
El canje ocurrió luego del desarrollo de unas conversaciones que se establecieron en marzo, cuando Maduro se reunió en Caracas con una delegación de alto nivel que encabezó Juan González, asesor del presidente Biden para América Latina.
Entre los excarcelados se encontraban cinco exdirectivos de Citgo: el expresidente José Ángel Pereira y los exvicepresidentes Tomeu Vadell, Alirio Zambrano, Jorge Toledo y José Luis Zambrano. Estaban acusados de delitos de corrupción, como malversación de fondos públicos, concierto de funcionario público con contratista, lavado de activos y asociación ilícita, entre otros.
Además del ciudadano Osman Khan y el marine retirado Matthew Heath.