David Macey, abogado defensor de Miami, enfrenta acusaciones federales de orquestar una conspiración de soborno que involucró a exsupervisores de la Administración de Control de Drogas para filtrar información confidencial sobre el caso de Alex Saab, actual ministro de Industria y Producción Nacional de Nicolás Maduro, quien estuvo detenido en Estados Unidos.
La agencia de noticias The Associated Press publicó que, según fiscales federales, Macey pagó sobornos a Manny Recio, un exagente de la DEA que trabajó como investigador privado después de su retiro, a cambio de información sensible sobre las investigaciones que rodeaban al empresario colombiano.
Esta información le permitió conocer detalles cruciales sobre las acusaciones federales que pesaban sobre Saab, así como las fechas exactas de los arrestos. Esto comprometió seriamente las investigaciones y el trabajo de los agentes de la DEA.
Alex Saab, clave en la red corrupta de Nicolás Maduro
Alex Saab, acusado por Estados Unidos de ser un importante intermediario de Maduro en presuntas operaciones de lavado de dinero y tráfico de alimentos, estuvo bajo una investigación de alto nivel.
Considerado una figura clave en la red de corrupción del régimen venezolano, fue vigilado por su presunta participación en actividades ilícitas internacionales. La filtración de información por parte de Macey y otros involucrados habría permitido a los defensores de Alex Saab anticipar movimientos legales.
Esas acciones resultaron en una amenaza directa contra la integridad del caso.
La acusación de soborno también revela cómo Macey, junto con otros abogados de la ciudad como Luis Guerra, utilizó su acceso a la red de la DEA para financiar un plan de sobornos que incluía el pago de entradas a eventos exclusivos, cenas y otros beneficios.
En particular, los fiscales detallaron cómo Recio y Costanzo, exagente de la DEA, compartieron información confidencial de investigaciones clave relacionadas con Saab y otros narcotraficantes, lo que permitió a los abogados involucrados gestionar sus estrategias legales de manera mucho más informada.
Los fiscales describieron a Macey como parte de un círculo de abogados defensores en Miami que compiten ferozmente por representar a presuntos narcotraficantes y otros criminales de alto perfil. Así tienen acceso a información sensible, que en este caso se usó para manipular investigaciones y poner en peligro los esfuerzos de la justicia.
De acuerdo con The Associated Press, si se halla culpable, Macey podría enfrentar serias consecuencias legales que pondrían fin a una carrera que lo ha establecido como uno de los abogados más destacados en la defensa de casos de narcotráfico y lavado de dinero en el sur de Florida.