Este miércoles se cumple un año del infortunado día en que Rufo Chacón, de 18 años de edad, perdió la vista y sufrió graves daños en el rostro a consecuencia de perdigonazos a quemarropa que le dispararon agentes de Politáchira.
Ante la grave crisis de los servicios públicos en Venezuela, el 1 de julio de 2019 se efectuó una protesta en la que participó Chacón acompañado de su mamá. Exigían mejor sistema de distribución del gas doméstico.
Pero en lugar de respuestas, los manifestantes recibieron perdigones, en un intento de dispersión de la protesta que causó el rechazo nacional e internacional, especialmente ante la evidencia de los disparos directos al rostro de Rufo Chacón.
Un año sin juicio
«Hoy hace 1 año que el joven Rufo Chacón perdió la vista a consecuencia de perdigones disparados por efectivos de Politáchira cuando protestaba junto a su madre. Un año sin juicio, un año de penuria económica para su familia», recordó el Foro Penal.
Mientras su caso sigue sin ser resuelto, la familia y él mismo no olvidan los 52 perdigones que marcaron su rostro y le quitaron la visión.
«A veces caigo, me levanto. Es difícil ver todos los días solo oscuridad. A veces no puedo ni dormir. Suelo sentir una ansiedad, una inquietud por poder ver», dijo a NTN24.
Luego de que su madre dejó su trabajo para cuidarlo, han buscado la forma de sobrevivir atendiendo un pequeño negocio de víveres y chucherías.