VENEZUELA

A sangre y balas: el papel de los militares en el régimen de Maduro 

por El Nacional El Nacional

Tras la ola de represión y crímenes que se perpetraron en Venezuela tras las elecciones del 28 de julio del 2024, la mayor parte de los casi 160.000 militares venezolanos que se encuentran activos no dieron ni han dado muestras de descontento o de plantarle cara al régimen de Nicolás Maduro. Esto es el resultado de una hábil maniobra que durante años habría preparado el chavismo.

El presidente de la Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio y oficial en el extranjero de las Fuerzas Armadas Bolivarianas (FANB), José Antonio Colina, detalló que casi toda la estructura militar actual está corrompida. En medio de todos los señalamientos de fraude electoral que envolvieron las elecciones presidenciales, grupos irregulares reprimieron a mansalva a la sociedad civil. La persecución de bandoleros contra los disidentes del régimen, fue la estrategia para tratar de callar las voces de quienes se manifestaron en las calles, exigiendo que se mostraran las actas de votación.

Una de las interrogantes más significativas en esa crisis de violencia, es, quiénes proporcionan todas las armas que usan los grupos represores que intimidan a la población.

¿Cuál es el papel de los militares?

En agosto el fiscal general del régimen Tarek William Saab admitió en agosto que 27 personas perdieron la vida en las manifestaciones. De acuerdo con diversas fuentes, las armas que usaron los delincuentes afectos a Nicolás Maduro para sembrar el terror, solamente podrían ser distribuidas por las Fuerzas Armadas Venezolanas y la Policía Nacional Bolivariana.

La abogada y defensora de los derechos humanos, Tamara Suju, fue una de las voces que denunció en sus redes sociales, la situación de infiltración del armamento con fines intimidatorios.

Aunque en un principio se creía que las fuerzas castrenses se pondrían del lado de la democracia, fuentes consultadas para este reportaje (pidieron mantener el anonimato por miedo a represalias) avalan la versión de José Antonio Colina, sobre presunta corrupción la Fuerzas Armadas en gran parte de su estructura.

 

“La Fuerza Armada está dividida en clanes de delincuencia. Cada general o comandante de unidades importantes, tiene bajo su mando a una cantidad de oficiales que están metidos en su red delincuencial. Hablamos de tenientes coroneles, capitanes y sargentos; eso aplica para todas las unidades importantes que están en este momento encargadas de la represión en Venezuela. Entonces, por ejemplo, pensar que un capitán se va insubordinar, porque le parece que está mal lo que están haciendo y va a ir en contra de un general que es un delincuente, no va a ocurrir”, señaló Colina.

Por otra parte detalló que “ los militares que están descontentos, son enviados a zonas inhóspitas o enviados a sus casas, sin cargo, para que su accionar sea completamente nulo”.

Esquema de presunta corrupción y actividades ilícitas en Venezuela 

1. Minería Ilegal en el Estado Bolívar


2. Narcotráfico


3. Corrupción en la Distribución de Alimentos


4. Contrabando de Combustible

  • Zonas clave :
    • Áreas Marítimas Insulares:
      • Margarita: Comando de Vigilancia Costera.
      • Güiria: Comando Marítimo del Atlántico.
  • Ejecutores: Miembros de la Guardia Nacional y otros oficiales en áreas estratégicas.

5. Penetración Militar en la Administración Pública

En la situación de Venezuela no hay salida rápida

En la crisis de Venezuela no se vislumbra una salida rápida. El régimen no mostró las actas que respaldaran el resultado de la supuesta victoria de Nicolás Maduro, sin embargo los representantes de la oposición sí mostraron las pruebas a favor del candidato Edmundo González. A pesar del descontento generalizado, de los pronunciamientos de la comunidad internacional y de las protestas internas de los venezolanos, los militares se mantienen aún del lado del régimen.

“Ellos (la FANB) están luchando por su supervivencia económica y por mantener sus actividades delictivas, más que que por cumplir su rol de policía de la Constitución “, agregó Colina.

La mirada está puesta en el ministro de la Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, funcionario que se mantiene como un elemento coercitivo del aparato represor de Maduro y sobre quién pesan señalamientos de narcotráfico por parte de la justicia de Estados Unidos.

La intimidación como arma disuasoria

Tras la violenta intimidación de las hordas de Maduro, la intensidad de las protestas disminuyó significativamente con el paso de los días. La represión fue utilizada como un instrumento para frenar la voluntad de millones de ciudadanos que votaron por un cambio.

Hasta el propio exalcalde mayor y dirigente chavista Juan Barreto señaló durante una entrevista con el periodista Jorge Ramos, que hay un proceso de “criminalización de protesta pacífica”.

En el barrio La Unión de Petare, en la Gran Caracas, el periodista Jhon Cisneros, vivió en primera persona el drama de la represión que sufrió la población civil a manos de miembros de los colectivos, una organización paramilitar chavista.

“Al día siguiente de las elecciones, mucha gente de Petare se dirigió hasta Altamira y Chacao caminando, para unirse a la protesta que tuvo lugar ahí. De regreso en la noche se presentaron efectivos de la Guardia Nacional en algunos  puntos de Petare y pude constatar cómo lanzaban disparos al aire para intimidar», dijo.

Luego, sobre las 10:30 pm comenzaron intentos de  saqueo y situaciones violentas en establecimientos comerciales, justamente cuando llegaron los colectivos. Si los miembros de los colectivos te veían una camisa blanca te agarraban a golpes. Tengo el caso de un amigo que a su hermano se lo llevaron secuestrado, simplemente porque les dio la gana, y ahora está preso en El Rosal (división de aprehensión del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas) y resulta que lo están acusando a él de terrorismo”, explicó Cisneros.

“He recibido advertencias para que no siga informando. Hay una Operación Tun Tun en marcha ( acciones de arrestos masivos y violaciones de los derechos humanos) pero esta operación viene orquestada por los mismos dirigentes del régimen, en complicidad con los mismos cuerpos policiales y los colectivos, para generar zozobra y miedo», aseguró.

«Después del 28 de julio utilizaron incluso cadenas de mensajes que se difunden en grupos y en cuyos mensajes se advierte a la población que no abran las puertas, que apaguen las luces, y que no salgan de las casas; es una zozobra con la que no puedes ni conciliar el sueño. Yo sigo adelante, estoy apostando por la libertad y el cambio en Venezuela, de manera no violenta, de manera pacífica y con el reconocimiento entre venezolanos, pero es fuerte y muy tensa la situación que se vive acá en Petare”, agregó Cisneros.

Ola de tensiones y represión en Venezuela, el papel de los militares

1. Elecciones controversiales:

2. Ola de protestas:

3. Violencia y represión:

  • Víctimas:
    • Al menos 27 muertos en enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad. Los fallecidos se registraron en Zulia, Táchira, Yaracuy, Lara, Aragua, Carabobo, Distrito Capital, Miranda y Bolívar. Varias de estas muertes fueron causadas por armas de fuego.
    • Más de 2.000 detenidos, la mayoría de ellos considerados críticos del gobierno.
    • Entre los fallecidos se cuentan dos agentes de la Guardia Nacional Bolivariana.

Corrupción en Venezuela, los militares

El testimonio de un general activo, que exigió confidencialidad, da muestras de la compleja situación de corrupción que opera en Venezuela: “ La verdad es que yo no soy chavista ni jamás lo he sido, y mucho menos soy corrupto. Pero hay que entender que los oficiales ganan muy poco dinero de su sueldo, menos de 50 dólares, y con los guisos (forma fraudulenta de obtener dinero) que les surgen, pueden lograr verdaderas fortunas. Hay compañeros que se hacen desde 300.000 dólares, hasta millones de dólares, el que puede busca su manera de resolver. Tienes que comprender que si cae Maduro se cierra el grifo y eso a la mayoría no le conviene, lamentablemente esa es la realidad y cada uno está por su bolsillo“.

Aseguró que la mayoría de los militares no tienen motivaciones políticas, ni simpatía por el régimen madurista, “pero tampoco les interesa dejar de lucrarse con la actual estructura que opera a lo largo y ancho de país”. Reiteró asimismo que es “es cierto que quien está armando a los colectivos y los grupos paramilitares con armamento militar es el propio gobierno, para blindar aún más su permanencia”.

Por Grant Torres | @Granttorres