La madrugada del 25 de septiembre del año 2003 es una fecha que las familias petroleras jamás podrán borrar de su memoria y los venezolanos tampoco, pues se perpetró un acto de violencia inaudito, cuando cientos de efectivos castrenses y colectivos desalojaron por la fuerza a trabajadores de Pdvsa y sus familias, de la urbanización Los Semerucos, estado Falcón, quienes habitaban legalmente las viviendas asignadas por la empresa desde hacía décadas. Este procedimiento fue el resultado de haberse opuesto a la politización de la industria petrolera y desviarla de su misión original.
Con una violencia desproporcionada, las fuerzas del Estado irrumpieron en los hogares de cientos de personas, destruyendo sus pertenencias y sembrando el pánico. Niños, ancianos y mujeres embarazadas no fueron respetados. Este acto, lejos de ser un simple desalojo, fue una clara violación a los derechos humanos y un abuso de poder que marcó un antes y un después en la vida de estas familias. Dejaron a niños sin escuelas y a familias enteras sin hogar.
En Los Semerucos fueron agredidos 34 niños, 19 adultos y detuvieron a 26 personas de la sociedad civil, en un acto abrumadoramente inhumano que dejó profundas heridas en la comunidad y en la conciencia de todos los venezolanos.
La urbanización Los Semerucos, era una comunidad construida en la etapa democrática de Venezuela con todos los servicios, cercana a la refinería de Cardón, perteneciente al Complejo Refinador Paraguaná, en Falcón. Allí convivían 600 familias y los niños contaban con colegios, servicio médico, parques y biblioteca. En la actualidad este campo petrolero, como la mayoría que fueron construidos desde la década de 1950 hasta 1990 en la zonas petroleras para alojar a sus trabajadores, lucen abandonados, en una decadencia abrumadora, por falta de mantenimiento, seguridad y desidia.
No olvidemos que la comunidad petrolera siempre fue un pilar fundamental para el desarrollo del país y hoy día se hace imprescindible su aporte para rescatar el país y su principal industria, y hacer posible la transición hacia el cambio, el progreso y la libertad plena en beneficio de los 28 millones de venezolanos. Es justo y necesario.
Con información de nota de prensa de la asociación civil Gente del Petróleo.
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional