La Universidad de Los Andes (ULA) atraviesa el peor momento de historia en un contexto de deserción estudiantil y de profesores, sin presupuesto y sin providencias estudiantiles.
El rector de la casa de estudios, Mario Bonucci, aseguró que para 2020, del presupuesto asignado a la universidad, que ya era deficitario, solo le entregaron 50%; en 2021 solo 10% del presupuesto en bolívares, que si lo hubiesen transformado a divisas representaba 1% del dinero, reseñó La Opinión.
Por su parte, en 2022 solo entregaron 3,24% del presupuesto planificado, exponiendo a la ULA a estar sin recursos para su operatividad.
A la dificultad que ese panorama representa, Bonucci agregó la condición de salarios precarios por los que laboran los profesores, quienes además no cuentan con el aumento de sus bonificaciones.
Deserción, bajos presupuestos y otras condiciones precarias de la ULA
Resaltó que la nómina de la ULA la integran 14.000 empleados, de los cuales 60% son profesionales jubilados que laboran de manera gratuita y por suma vocación.
Además, debido a la deserción de profesores (10%) se mantienen vigentes las vacantes porque no hay quienes se postulen con las ofertas salariales de la universidad. Puso como ejemplo su caso y confesó que su ingreso como rector de la universidad es menos de 100 bolívares.
En cuanto a los estudiantes, comentó que no cuentan con comedor, transporte ni la exitosa red de posadas que habían implementado para ayudar a los universitarios de bajos recursos.
«Si un estudiante quiere comer, tiene que pagar, si un estudiante quiere dormir, tiene que pagar su residencia. Esta política está obligando a que podamos afirmar que, por la vía de los hechos, este Ministerio de Educación Universitaria privatizó la educación» dijo Bonucci.
Esas son algunas de las razones por las que la ULA tiene una diáspora estudiantil cercana a 60% (en valores absolutos) que comenzó desde el año 2016. Esto quiere decir que en 6 años ha perdido 2 terceras partes de los estudiantes.
Enfatizó que en algunas facultades la deserción estudiantil es de entre 5 y 10%, pero en otras es superior.
Pese a todo este panorama adverso, Bennuci aseguró que es el compromiso y vocación de los profesores que hace que se mantengan formando profesionales de calidad, y de alumnos que siguen creyendo en la ULA como una de las mejores universidades de Venezuela, con proyección en los rankings internacionales.