Los incendios en Siberia abarcan una superficie de 2,4 millones de hectáreas (24.000 kilómetros cuadrados), 400.000 hectáreas menos que hace una semana, informó este lunes el Ministerio de Emergencias de Rusia.
Por su parte, Ministerio de Defensa informó este domingo que la aviación militar en 4 días consiguió apagar 753.000 hectáreas afectadas por el fuego, que en algunas zonas continúa propagándose.
Ante la gravedad de los incendios, el 31 de julio pasado el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ordenó al ejército sumarse a las labores de extinción.
Cuatro entidades siberianas de la Federación de Rusia, las regiones de Irkutsk y Krasnoyark y las repúblicas de Yakutia y Buriatia, fueron declaradas en estado de emergencia.