TECNOLOGIA

El contenido de odio se disparó en X tras los profundos recortes de Musk

por Avatar EFE

Los mensajes con contenido de odio se dispararon en X (antes Twitter) a raíz de los profundos recortes en personal desde la llegada en octubre de 2022 del magnate surafricano Elon Musk. Así lo denuncia este jueves un informe el organismo australiano para la seguridad en internet.

La Comisión de Seguridad Electrónica de Australia dijo que estos recortes y el restablecimiento de miles de cuentas bloqueadas por difundir contenidos de odio crearon una «tormenta perfecta» para la publicación de contenido dañino en X.

El regulador australiano tuvo acceso al desglose detallado de los ingenieros de software, moderadores de contenido y otro personal de seguridad que trabaja en X.

Conforme a estos datos, más de 1.200 trabajadores de «personal especializado en seguridad» a nivel global abandonaron X desde la llegada de Musk. Mientras, se restablecieron unas 6.100 cuentas previamente bloqueadas.

«A varios de estos usuarios reincorporados los bloquearon por odio en línea. Si se permite que los peores infractores vuelvan a actuar y al mismo tiempo se reduce significativamente el personal de seguridad cuyo trabajo es proteger a los usuarios de daños, existen claras preocupaciones sobre las implicaciones para la seguridad de los usuarios», apunta la directora del organismo Julie Inman Grant.

Indiferencia ante los discursos de odio

La representante australiana remarca que esa reducción en el personal repercutió además de manera directa en los tiempos de respuesta de la red social ante denuncias a los mensajes de odio.

Australia encabeza el impulso global para regular las redes sociales. Obliga a las empresas de tecnología a describir cómo están abordando cuestiones como el discurso de odio y el abuso sexual infantil.

Pero los intentos de ejercer estos poderes en ocasiones se reciben con indiferencia por parte de las compañías.

En octubre de 2023, la comisión australiana multó a X con 610.500 dólares australianos (más de 410.000 dólares estadounidenses). Alegó que no demostró cómo estaba tomando medidas contra la pornografía infantil. Pero X ignoró la fecha límite para pagar la multa, antes de iniciar acciones legales en curso para anularla.