El éxodo masivo venezolanos ha ocasionado que centenares de apartamentos y casas en el país permanezcan vacíos ante la negativa de sus propietarios de vender sus propiedades.
“El temor de ellos era que los invadieran o que los robaran y perdieran lo poco que les quedaba acá en el país”, indicó Víctor, un joven que se dedica a visitar viviendas de familiares y amigos que han abandonado el país, reseñó La Voz de América.
Víctor comentó que gana 50 euros mensuales por visitar las propiedades y dar de comer a las mascotas de unos vecinos que emigraron del país.
De acuerdo con la Cámara inmobiliaria de Caracas, los precios de los inmuebles han disminuido aproximadamente 75% durante los últimos cinco años.
Con información de La Voz de América.