El programa Samuel Robinson, que nivela a bachilleres de liceos públicos que quieran ingresar a alguna carrera de la Universidad Central de Venezuela, tiene el mismo presupuesto de 2007, un total de 207.000 bolívares al año. Según esa planificación, un profesor debería recibir 25 bolívares por hora de clase. Aunque el rectorado destinó algunos recursos para que el pago suba a 123 bolívares por hora, el déficit de docentes sobrepasa 50%, indica Mery González, coordinadora del programa. Desde 1998, cuando egresó la primera cohorte de ?samuelitos?, 1.351 estudiantes han conseguido un cupo en la UCV. Cada año, en el programa se nivelan los conocimientos de 300 alumnos en promedio, en áreas como matemática, lectura y escritura, decisión vocacional, física, química, biología o investigación, dependiendo de la carrera de preferencia. Para ello, el programa se divide en 3 fases y cada una requiere de 40 profesores para atender las 7 secciones en las que fraccionan al grupo. ?Sabemos que el profesor se merece mucho más que solo 24 bolívares la hora. Es un aprendizaje casi personal y se invierte muchísimo tiempo en esa función. Sabemos que ofrecemos muy poco?, confiesa González. Las áreas de matemática y de lectura y escritura son las más críticas por la falta de docentes. Nina Rodríguez, coordinadora de Secretaría, explica que están en conversaciones con profesores de todas las facultades de la UCV para ofrecer docentes a las materias con mayor déficit dentro del Samuel Robinson: ?Hemos estado buscando docentes que nos acompañen en el programa, con el pequeño aliciente del pago, y sabiendo lo que significa formar a estudiantes recién egresados del bachillerato?. A pesar de la incertidumbre que se creó este año, cuando el Ministerio de Educación Universitaria resolvió que la Oficina de Planificación del Sector Universitario centralizara la asignación de plazas en todas las universidades nacionales, Amalio Belmonte, secretario de la UCV, asegura que todas las modalidades de ingreso de la institución se mantendrán, incluyendo el Samuel Robinson. ?Todos los que han sido seleccionados por el programa tienen garantizado su cupo. Sin duda la crisis que está viviendo la universidad puede posponer el ingreso, como el del resto de los estudiantes?. Mejorar la base. El rendimiento de los ?samuelitos? una vez que empiezan el estudio de la carrera que eligen es de casi 99%, revela Belmonte. Por esa razón y vista la aparente búsqueda de equidad del Ministerio de Educación Universitaria en el acceso a los estudios superiores, el secretario de la UCV asegura que han propuesto a la OPSU que replique el Samuel Robinson en todo el país. ?El programa tiene una tasa de rendimiento muy alta, examina el factor vocacional con detenimiento y tiene incidencia en los sectores más depauperados, por eso nuestra propuesta?. González asegura que a partir de 2006 los bachilleres que se recibían en el programa comenzaron a presentar problemas en su educación básica, en materias como Física, Química, Biología, Matemática y Castellano. ?Tuvimos que ajustar muchos contenidos porque los alumnos no los habían visto por falta de profesores. Cada día tenemos más deserción porque tienen una idea de que es un propedéutico suave, pero se encuentran con que el nivel de exigencia es alto?. Así, la sugerencia de hacer del Samuel Robinson una iniciativa nacional busca obtener alumnos con ?mejor calidad?. ?La idea es que no lleguen tan desvalidos como han estado llegando de la educación media. En su momento la OPSU no lo rechazó ni lo tomó en cuenta, porque eso evidencia las deficiencias de su propia educación?, dice Rodríguez. La otra opción que propone la UCV es que el gobierno nacional fortalezca al Samuel Robinson dentro del presupuesto anual o por vía directa. EL DATO El Samuel Robinson no tiene un espacio exclusivo dentro de la UCV, siempre ha dependido de las aulas que puedan ceder las facultades. El aumento de la matrícula por las asignaciones de la OPSU podrían entorpecer el desarrollo del programa, por lo que las autoridades han decidido no revelar la lista de admitidos para el período 2015-2016 hasta tanto no haber solucionado el inconveniente. El paro profesoral podría retrasar la publicación de los nuevos ingresos.