Ayer en la mañana el bloque de diputados de la Asamblea Nacional de Aragua y la Comisión de Familia de la AN solicitaron al Ministerio Público investigar la procedencia de la yuca amarga que desde el sábado 10 causó la muerte de seis niños y un adulto en el estado Aragua.
La diputada Karín Casanova, vicepresidenta de la Comisión de Familia de la AN, enfatizó que es necesario aclarar las condiciones en las que fue comercializado el tubérculo, en los municipios Revenga y Santos Michelena donde residen las cuatro familias que presentaron signos de intoxicación durante cuatro días. “Los exámenes médicos arrojaron un cuadro de envenenamiento severo por cianuro, causado por el consumo de esa yuca que estaban vendiendo libremente en las calles”, afirmó.
Los últimos tres niños de 12, 4 y 2 años de edad, habitantes del sector Tejerías que ingresaron intoxicados el martes en la tarde al hospital José María Benítez en La Victoria, se mantienen estables y bajo vigilancia médica. “Aún les están haciendo las pruebas y esperamos que se recuperen pronto. Se les pudo administrar el antídoto que hacía falta en el hospital”, dijo la diputada.
Informó que la madre de uno de los niños fallecidos y un adulto de 56 años de edad se recuperan con dificultad, aunque están recibiendo tratamiento y cuidados especiales en el Hospital Central de Maracay.
El sábado pasado, una vez conocidas las muertes de las niñas Franyeli Pérez y Gabriela Carrillo Pérez, una comisión de funcionarios de la Base de Homicidios del Cicpc decomisó y prohibió la venta de yuca en varios puestos ambulantes del sector Tejerías. Otra unidad recogió y quemó los tubérculos ayer, que algunas familias de los municipios Revenga y Santos Michelena adquirieron durante el fin de semana.
El diputado José Manuel Olivares, presidente de la Comisión de Desarrollo Social Integral de la AN, denunció que el caso es consecuencia de la crisis humanitaria y la falta de alimentos que no ha sido resuelta por el gobierno.
“Es terrible cómo la vida de niños y de adultos se sigue perdiendo por el consumo de la yuca amarga, producto que contiene veneno, y que no debe ser ingerida por las personas. A este gobierno no le importa que el futuro del país se muera desnutrido y tampoco le interesa que familias enteras fallezcan ante la falta de alimentos”.
El parlamentario lamentó que las siete muertes se hayan sumado a otros casos registrados durante el año 2017 en el que se reportaron 12 fallecimientos durante los primeros siete meses, en Caracas, Zulia y Monagas. “Las personas recogen los restos de productos que no están en buenas condiciones, o compran alimentos a un precio bajo, como la yuca amarga que en muchos casos no contiene venitas, y lamentablemente también es comercializada por personas inescrupulosas”, dijo.