Los niños en la ciudad de Ureña, estado Táchira, deben cruzar a Cúcuta (Colombia) mediante las trochas, debido al cierre de la frontera con el país luego del 23 de febrero.
Más de 3.200 estudiantes venezolanos han sido afectados por el cierre fronterizo. Voluntarios de organizaciones defensoras de los derechos humanos deben guiar a los niños para que puedan llegar a sus centros educativos, ubicados en territorio colombiano.
Los venezolanos que buscan alimentos o medicinas en territorio colombiano, además de la urgencia de ir a trabajar o la de los niños de estudiar, tienen que estar preparados para hacer equilibrio en un improvisado camino de piedras sobre el agua o utilizar una balsa.
Las autoridades colombianas se han pronunciado a favor de que se reactive un corredor humanitario en la frontera colombo-venezolana. La Cancillería colombiana exhortó a la comunidad internacional atender esta petición ante la situación fronteriza.
Los puentes fronterizos con Colombia se encuentran cerrados desde el 23 de enero, cuando Juan Guaidó, presidente interino de la República, y varios presidentes de la región intentaron ingresar ayuda humanitaria a territorio venezolano.
NIÑOS QUE VIVEN EN TÁCHIRA CRUZAN EL RÍO O USAN BALSAS PARA IR A CLASE en Cúcuta, DEBIDO AL CIERRE DE LA FRONTERA POR EL TIRANO GENOCIDA. @ReporteV1 pic.twitter.com/g8pYKWjKKD
— Pedro Paolucci (@paolucci40) 6 de marzo de 2019