Como parte del «Programa contra todo tipo de violencia física, emocional o acoso escolar», organizado por la Fundación Petare y coordinado por Alejandro Márquez González, recientemente se llevó a cabo una charla que tuvo como objetivo alertar y acercarse a posibles víctimas del grooming, así como sugerir medidas preventivas y asesoramiento sobre esta problemática.
Durante el conversatorio que se efectuó en la Escuela Petare II, ubicada en el municipio Sucre del estado Miranda, y en el que participaron fiscales de Violencia de género, Familiar y Sexual, Márquez recordó que la campaña comenzó el año pasado y que la misma está dirigida a familias, docentes, alumnos de primaria y secundaria.
Al referirse al gromming, explicó que se trata de una temática sobre la que se debe conversar para brindarle herramientas a los jóvenes. “Es parte de nuestro rol como adultos; cuidarlos e informarles que tienen el derecho a saber cómo cuidarse”, indicó.
“Ese compromiso nos incentiva continuar con las charlas y dar apoyo para realizarlas en otros centros educativos”, remarcó.
Márquez explicó que el grooming es una forma de acoso, con fines sexuales, a menores de 18 años de edad a través de Internet, redes sociales y chats. El objetivo de estos acercamientos es ganarse la confianza de los menores para poder realizar acciones con connotaciones sexuales o para que acepten un encuentro real con el acosador.
Señaló que existen cuatro etapas en la comisión del delito de grooming, aunque no en todos los casos se da de esta manera. En una primera fase, quien realiza el delito suele fingir ser menor de edad con la intención de generar un lazo de amistad con la víctima. Ya construido el vínculo, el segundo paso es obtener información clave del o la menor.
En la siguiente etapa el acosador busca que la víctima se filme o se fotografíe sin ropa, realizando expresiones de connotación sexual. Por último, el autor del delito comienza a extorsionar a la víctima, la amenaza con contarle a sus padres o con difundir las fotos.
“Todo esto se desarrolla con el objetivo de obtener más material pornográfico o encontrarse cara a cara para concretar un abuso sexual”, explicó.
Prevención
Para evitar ser víctima del grooming, Márquez insistió en que es fundamental que los menores rechacen cualquier tipo de solicitud de amistad que les llegue de un desconocido o a través de las redes sociales. De la misma forma sugirió que nunca deben aceptar ni descargar archivos cuya procedencia desconozcan.
“En las redes sociales tienen que usar perfiles privados. Además, para cualquier actividad que hagan en Internet o en computadoras en red, es preciso que usen contraseñas que solo ellos conozcan y que no deben compartir con nadie. Hay que recordar que cualquier foto o video de nuestros contactos que se publique en sitios públicos podrá ser visto por cualquier persona y es muy difícil bajarlo de los sitios web”, advirtió.
Adelantó que como parte del programa que coordina, durante el mes de junio se dictarán unas 50 charlas en escuelas públicas, las cuales estarán dirigidas principalmente a estudiantes de primaria y secundaria.
El «Programa contra todo tipo de violencia física, emocional o acoso escolar» se desarrolla en varias etapas y se perfila como un proyecto nacional, con el apoyo de instituciones del Estado y un equipo de voluntarios integrado por universitarios y miembros de la comunidad.
Con información de nota de prensa.
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