Funcionarios de Protección Civil del estado Bolívar se preparaban ayer para atender a los primeros afectados de los municipios Sucre, Cedeño, Heres y Caroní, luego de una nueva crecida del río Orinoco, que amaneció con seis centímetros más y alcanzó la cota de 17,88 msnm. El ritmo experimentado por el importante afluente en las dos últimas semanas hace presumir a las autoridades que hoy llegará al nivel de alerta roja, ubicado en 18 msnm, pues las lluvias continúan en los estados del sur.
Comisiones de PC se han distribuido por los sectores más vulnerables para atender a la población afectada por los problemas de los ríos Orinoco y Caroní. Hasta ayer habían sido reportadas 6.953 personas en toda la entidad. Las zonas con mayor impacto son Caicara del Orinono, donde el río alcanzó el nivel de alerta roja, y Ciudad Bolívar, entidad en la que el afluente permanecía en alerta amarilla pero sobrepasó los niveles históricos del año 1943 y se cree que superará los de 1976 , cuando presentó 18,05 msnm. “Cualquier escenario está dentro de las posibilidades porque la crecida ha sido constante”, expresó uno de los funcionarios.
Aislados. Grupos familiares residentes en Puerto Ayacucho continuaban ayer incomunicados luego del desbordamiento del río en la capital de Amazonas, en el paso de La Chalana, donde la cuota superó 54,20 msnm. “No hay transporte que pueda traernos comida y medicamentos. La situación es muy grave en esta zona”, afirmó María Alejandra Pirela, habitante de ese sector, quien dijo además que las comunicaciones telefónicas funcionan solo de modo intermitente.
Señaló que la ciudad de San Fernando de Atabapo permanecía 95% cubierta por las aguas desbordadas del caudal.
En Amazonas se cuentan más de 13.000 damnificados, lo que lo convierte en el estado más afectado por el rebosamiento de los ríos Atabapo, Orinoco y Guavire, como consecuencia de las fuertes precipitaciones que también han impactado en el área colombiana.
El gobernador Miguel Rodríguez y el Comando Unificado inspeccionaron los lugares más aquejados y atendieron a personas de los sectores Libertad de Guayabal y Santa María de Cupave, a quienes les llevaron alimentos y fármacos.
“No hay transporte que pueda traernos comida y medicamentos. La situación es muy grave”
María Alejandra Pirela
Habitante de Puerto Ayacucho