Debido a las múltiples protestas registradas desde hace varios días, por la entrega incompleta de pernil ofrecida por el presidente Nicolás Maduro a través del Clap, el gobernador del estado Trujillo, Henry Rangel Silva, expresó que: “hay gente que nunca ha comido pernil y ahora protestan porque no llegan”. “Uno por un pernil no puede entrar en una crisis existencial innecesaria”, sentenció el gobernante oficialista de la entidad andina.
Lo que resulta irónico de todo esto es que hace un par de semanas Rangel Silva, afirmó que a Trujillo habían llegado “9 gandolas con 48.600 piezas de pernil, en espera de un cargamento similar para completar las 70.200 unidades asignadas al estado andino”.
Entonces la pregunta es señor gobernador ¿Qué pasó con lo ofrecido? Porque usted admitió que «la orden de Maduro era entregar un pernil completo».
Leamos lo que opinan los seguidores de @ReporteYa en torno a lo que han considerado una nueva burla hacia el pueblo que los eligió a quienes les prometieron en cadena nacional se les entregaría un pernil por familia, sería acosa un vil chantaje para que acudieran a votar el pasado 9 de diciembre, pero aún así su misma gente tampoco salió a las urnas.
Ernesto Salas @ernestos001 dice: «Es verdad Rangel. Hay de todo en este mundo. Por ejemplo gente como tú».
Hugo Araujo Díaz @huaradiaz destaca: «Claro, el hace las tres papas más las meriendas y agasajos, comida en restaurantes y terneras. ¡Rojo care’ tabla!».
Jmoreno1964 @jmoreno1964 comenta: Rangel Silva, tu eres el único en Trujillo que tienes derecho a comer pernil, por supuesto con dineros del pueblo, porque jamás te metes la mano al bolsillo para hacer un mercado, sólo despilfarran el dinero de los venezolanos».
Berci Rodríguez @Trinajlv subraya: «Como se burlan de los pobres chavistas por un pernil».
Jairo Rojas @jairoazacon recuerda: «Será ahora en este tiempo que la gente no come pernil, si eso antes era la tradición en cada hogar venezolano y ustedes la acabaron dando migajas».
Yraalbano @yraalbano comparte: «Rangel Silva, soy de Trujillo y desde que tengo uso de razón, en mi casa se comía cochino, si estar mendigando las dádivas del gobierno».