La crisis humanitaria en nuestro país ha afectado a la gran mayoría del pueblo venezolano, incluyendo a los más pequeños de la casa, así lo indican las cifras de niños abandonados por sus padres que les ha tocado la difícil decisión de emigrar para poder mantener la supervivencia de sus hijos con el dinero que ganan en el exterior. Sin embargo, este hecho se ha convertido en un problema de salud pública.
Hasta la fecha del mes de julio se han contabilizado 4.444 casos a nivel nacional de niños abandonados por sus padres, así lo indica Luisa Pernalete, coordinadora del Centro de Formación e Investigación de Fe y Alegría, quien además expresa que sólo en la ciudad capital y en los Estados Vargas y Miranda, unos 1.008 niños y adolescentes han visto partir a sus padres a países como: Perú, Ecuador y Colombia.
Cabe destacar que la mayoría de estos padres no podrán regresar a Venezuela, lógicamente la situación económica fuera de nuestro país está mucho mejor, sin embargo, el dinero que ganan estos padres únicamente les alcanza para costear su alquiler, su alimentación y poder mantener a sus hijos en Venezuela.
La Educadora Pernalete también argumenta que en la mayoría de estos casos estos niños son dejados a cargo por familiares cercanos, amistades o en el caso extremo, por algún vecino. Esto acarrea consecuencias negativas para los menores de edad, como por ejemplo: rebeldías prematuras, rabia y tristezas por la partida de sus padres.
Además hay que resaltar que muchos de estos niños y jóvenes se encuentran sin la correcta supervisión de sus representantes, lo que propensa a pasar mucho tiempo en la calle haciendo cualquier cantidad de tremenduras y expuestos al peligro de la explotación económica o manipulación por parte de adultos en situación de calle.
«¿A quien sí responsabilizo? al Estado, pues ¿dónde están los centros de orientación familiar para que podamos atender nosotros a esos niños? tenemos que enfrentar el asunto», explicó Pernalete.
En @ReporteYa seleccionamos algunas opiniones de nuestros destacados seguidores:
La Educadora, Luisa Pernalete @luisaconpaz redacta: “Tengo que incluir en mis oraciones a los 4.444 niños y niñas «dejados atrás» que estudian en Fe y Alegría. Rezo por ellos que sufren, y también por los padres que se han ido, que también sufren. Rezo por los que no están contabilizados”.
La usuaria, Gloria Rodríguez @grrhodriguez señala: “Pidiendo a nuestra Madre del cielo «María» los cubra con su manto y que sus madres regresen pronto por ellos a una mejor Venezuela”.
La tuitera, Cruz Acosta @cruzmacostac expresa: “La ardua labor que le toca a los educadores de verdad en el país es colosal. Deben reincorporarse masivamente a la preparación de niños y jóvenes en sus comunidades pues no pueden llegar a las escuelas. Así, además de educarlos deben compensar el vacío que dejaron sus padres idos”.
La usuaria, Virginia Bolívar @vigysb indica: “Es una situación muy triste, el efecto de la separación de los padres causa impacto emocional en los niños y adolescentes”.
El activista político, Nicmer Evans @NicmerEvans informa: “El desastre humanitario que los maduristas nunca contarán ni verás en VTV o Globovisión… Colegios reportan más de 34.000 “niños dejados atrás” por padres que emigran”.
El usuario, Carlos Alberto Niño @canino007 opina: “La verdad es que algunos venezolanos salen a buscar trabajo afuera del país para enviar remesas a sus familiares y eso ya no le gusta a los protagonistas internacionales de esta crisis, porque eso está haciendo que la gente pueda resolver la economía en el país”.
Nuestro seguidor, Jorge Villarroel @jotavillarroel escribe: “El caos es gigantesco, no es de sólo 34.000 niños, la cifra supera facilmente los 3.500.000 de venezolanos que abandonan desesperadamente su país de cualquier forma”.
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