La situación en Venezuela relacionado a las mujeres embarazadas (sobre todo jóvenes menores de edad), es tema de alarma para todo el país. Tal es la desesperación de las parturientas que algunas deciden abandonar su cría (como el reciente caso del recién nacido hallado a las puertas de una catedral en Caracas) y otras más conscientes prefieren dar a luz en Colombia o Brasil.
Los fracasos del modelo cubano de medicina implementado en Venezuela han perjudicado el control prenatal, sobre todo en los sectores pobres de la población, lo que contribuye a que los niños venezolanos nazcan cada vez más delgados y pequeños, y por ende más propensos a enfermarse y a morir.
Gracias a una filtración obtenida por los reporteros de Efecto Cocuyo, en alianza con el Proyecto de Periodismo sobre Crimen Organizado y Corrupción (Occrp por sus siglas en inglés) y el Centro Internacional para Periodistas (ICFJ por sus siglas en inglés) -a pesar de los esfuerzos del Gobierno de ocultar la información, sancionar a quienes la hagan pública e imponer la censura- se supo que en la Maternidad Concepción Palacios, la más importante de Venezuela, el bajo peso al nacer ha tenido una tendencia ascendente desde 2013.
El alza más brusca fue entre 2015 y 2016, pues el indicador pasó de 11,58% a 16,08%. En la Maternidad Santa Ana, el bajo peso al nacer subió de 11,24% en 2015 a 13,12% en 2016, y en 2017 se ubicó en 13,92%. La crisis humanitaria causada por la escasez y el alto costo de bienes y servicios esenciales tiene un impacto brutal en las embarazadas y sus hijos cuya principal preocupación es la dificultad para alimentarse debido a la escasez y el alto costo de la comida.
Las muertes de madres dejaron para el año 2014 a 438 recién nacidos huérfanos, la tasa de mortalidad materna alcanzó 72,03 por cada 100.000 nacidos vivos y el 24% de los niños y niñas nacieron de madres adolescentes. Sin embargo, la cifra ha ido en aumento. En 2015, 456 mujeres murieron por causas relativas al embarazo y en 2016 fallecieron 756; es decir, un incremento de 65,79%.
La coordinación de la Ruta Materna es responsabilidad de la Dirección General de Articulación de Programas, Servicios y Redes de Salud del Ministerio de Salud. A un año del lanzamiento de Ruta Materna no mejoraron los indicadores. Las estadísticas oficiales revelan que en 2015 murieron 8.812 niños y en 2016 otros 11.466, lo cual implica 30,12% de aumento de la mortalidad infantil.
Un reciente informe anual de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría que terminó de ser elaborado en febrero del corriente año 2018, trasluce que el embarazo en adolescentes sigue siendo un problema de suma importancia en Nueva Esparta.
Germán Rojas, directivo nacional de esa institución lamentó que en esta entidad, de acuerdo con las observaciones de la Mesa de Trabajo de Embarazo en Adolescentes, todavía se sigan presentando casos y detalló que en el año 2017 se registró el nacimiento de 1528 niños de madres adolescentes; entre ellos 31 niños de madres entre 10 y 14 años y 1.497 niños entre 15 y 19 años.
En @ReporteYa seleccionamos algunas opiniones de nuestros destacados seguidores:
Nuestro seguidor, canirove @gavramaj redacta: “El hombre nuevo, niñas que deberían estar estudiando se embarazan para cobrar un bono que no alcanza y luego dejar niños abandonados, eso quiere el Gobierno, ignorancia para dominar y someter a su antojo al pueblo”.
La Ilustradora, Yosie Zhang @yosiezhan señala: “Aparte de recibir el bono de las embarazadas, abandonan al bebe”.
Nuestro seguidor, Carlos @cnunez545 informa: “El colmo de la sinvergüencería, mas fácil parir y recibir bonos que estudiar y prepararse”.
La tuitera, Alejandra Gómez @AGomezHenriquez comunica: “1 pañal cuesta más de tres millones, aparte la formula (que no se consigue) cuesta 5 millones, la leche no en todos lados las consigue, para comprar vitaminas y medicinas tiene que gastar como mínimo 10 millones”.
Nuestro seguidor, Diego E. Arria @Diego_Arria expresa: “Un viaje obligado: Embarazadas en Venezuela migran para dar a luz (ya no hay luz ni para nacer)”.
El Director de Amnistía Internacional Venezuela, Marcos Gómez @GomezMarcos indica: “La #EmergenciaHumanitaria en Venezuela ha obligado a cientos de embarazadas a huir. Prefieren migrar antes de dar a luz en un país donde la vida de sus hijos y la de ellas mismas no está garantizada”.
La usuaria, Maracusinha @desousafc escribe: “La situación en Venezuela empeora cada día y todos los días veo en Facebook mujeres embarazadas. Entre unos (15/20) años, subiendo la foto del eco y poniendo «Que bendición, no te conozco y ya te amo. Pronto estarás con nosotros » I do not understand”.
La Locutora, Albany Jiménez @NirianAlbany dice: “Qué lástima que abrir las piernas valga más que estudiar en Venezuela, no quiero ser mala pero ahora veremos muchas triponas embarazadas solo por dinero”.
El Endocrinólogo, Marcos Lima Martínez @Marcoslimamd opina: “Por cierto, el bono para las embarazadas cubre solo 1 al mes”.
La Comunicadora Social, Daisy Manrique @DaisyManrique argumenta: “Maduro, las embarazadas no necesitan tu apoyo, ni tu abrazo. Necesitan pañales, medicinas, y nuevo Gobierno para que sus hijos tengan futuro en Venezuela”.