La audiencia preliminar del activista Lorent Saleh, uno de los galardonados con el premio Sájarov de este año, fue diferida por cuadragésimo cuarta vez (44).
«El tribunal está cerrado. No están trabajando hasta el 8 de enero», dijo su defensor, Juan Luis González, quien explicó que los aplazamientos se deben siempre a que el Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), no lleva al detenido al tribunal o la corte no está abierta como ocurrió este miércoles.
González es abogado además del también activista estudiantil Gabriel Vallés, preso junto a Saleh desde que el gobierno colombiano los entregó al Sebin hace más de tres años.
Vallés y Saleh fueron acusados en 2011 de un delito de divulgación de información falsa que causa zozobra, cuando fueron detenidos con resorteras y otros materiales para utilizar durante las protestas y con carteles en los que acusaban al entonces presidente Hugo Chávez de mentir sobre sus promesas electorales.
Los dos jóvenes activistas se marcharon tiempo después a la vecina Colombia, desde donde el presidente Juan Manuel Santos los entregó al Sebin en 2014.
A su llegada a Venezuela, Saleh fue acusado de otros tres delitos por haber falsificado, mientras trabajaba para el servicio de extranjería venezolano, documentos de identidad para ciudadanos colombianos, para que participaran en manifestaciones violentas en Venezuela.
Saleh nunca ha trabajado para el servicio de extranjería ni para ninguna otra oficina del gobierno venezolano, cuentan su familia y su abogado.
En varias intervenciones televisivas, dirigentes chavistas acusaron a Saleh y Vallés de tener vínculos con paramilitares colombianos y con el ex presidente del país cafetero Álvaro Uribe y de planear actividades golpistas y terroristas en Venezuela, pero estas acusaciones no constan en su expediente judicial.
Tras su entrega al Sebin, Vallés y Saleh pasaron detenidos en solitario y aislados 26 meses en las celdas de «La Tumba», como se conoce el sótano 5 del edificio del servicio de inteligencia situado en Plaza Venezuela.
«Es la cuarta Navidad y el cuarto fin de año que pasan encerrados, pero están fuertes y ellos están resistiendo», dijo la madre de Lorent, Yamile Saleh, sobre el estado de su hijo y de Vallés, que están presos en El Helicoide.
Saleh es, junto a otros detenidos considerados presos políticos por el Parlamento Europeo, uno de los ocho venezolanos premiados este año con el Sájarov, el prestigioso galardón anual con que la Eurocámara reconoció en 2017 la lucha por los derechos humanos y la democracia de la oposición en el país caribeño.
Según la ONG Foro Penal, Venezuela comienza el año con más de 200 personas privadas de libertad por motivos políticos.