En horas de la tarde del 8 de abril un grupo de personas encapuchadas causó destrozos a la Dirección de la Magistratura del Tribunal Supremo de Justicia (DEM), en Chacao.
Ese mismo día fueron detenidos siete hombres.
Sus nombres son: Miguel Cegarra Mendoza (25), Omar López Martínez (32), Larry Klein Aparicio (22), Luis Rodríguez García (20), Luis Ospina Ortega (22), Kevin Hernández Colmenares (24) y Alfredo Ocando Rincón (33). Todos fueron enviados a la cárcel 26 de Julio, situada en San Juan de los Morros.
Ninguno de ellos se conocía en el momento en que los capturaron.
“La relación de entrada y salida de llamadas demuestra que no se conocían entre sí, por lo que es difícil que hubieran sido parte de una banda criminal. Los testimonios de varias personas promovidas en la fase de investigación dan cuenta de que fueron detenidos en lugares distintos”, explicó Carlos Daniel Moreno, abogado de seis de los aprehendidos (no lleva el caso de Alfredo Ocando).
Indicó que no existen elementos suficientes para demostrar que participaron en los actos vandálicos contra el DEM: las aprehensiones ocurrieron en diferentes circunstancias y las llevaron a cabo distintos organismos de seguridad (GNB y PNB).
Aunque en redes sociales hay videos que demuestran que el DEM fue destruido por sujetos encapuchados, Moreno señaló que en ninguno de ellos es posible identificar a alguno de los detenidos.
En el caso de Guido Rodríguez, quien fue mostrado en cadena nacional diciendo que dirigentes opositores le pagaron 300.000 bolívares para que quemara la sede institucional, el abogado explicó que al joven lo coaccionaron para que hiciera esta declaración.
Beatriz García, madre de Guido Rodríguez, coincidió con que su hijo fue obligado a grabar el video. Afirmó que le pusieron bolsas plásticas en la cabeza y que le hicieron quemaduras para que hablara.
A todos los capturados los imputaron y se encuentran en un pabellón habilitado en la cárcel 26 de Julio. Allí —relató Moreno— han sido tratados con normalidad, reciben visitas y están separados de los presos comunes.
Dos de los detenidos van para juicio: Larry Aparicio y Omar López. Los otros cinco están a la espera de que se distribuya la causa a un tribunal.
En distintos lugares y circunstancias
Larry Aparicio: la PNB lo detuvo en las inmediaciones de Chacao cuando regresaba a su casa del Sambil. Hacía dos años que no veía a su familia, pues estaba viviendo en Suiza. Tenía apenas tres semanas en Venezuela. Fue imputado por incendio, intimidación pública, agavillamiento y daños violentos.
Kevin Hernández: fue detenido en horas de la noche cuando se encontraba en la plaza Bolívar de Chacao; ya había pasado la destrucción del DEM. Su madre, Belkis Colmenares, dijo que su hijo le contó que estaba esperando a alguien cuando se lo llevaron unos colectivos junto a tres guardias nacionales. Lo imputaron por daños violentos, agavillamiento e intimidación pública.
Omar López: fue funcionario de Polichacao. Lo detuvieron en Chacao, donde está su residencia, cuando iba a comprarle un medicamento a su hijo. Lo imputaron por incendio, intimidación pública, agavillamiento y daños violentos.
Guido Rodríguez: estaba protestando el 8 de abril junto con su hermana y su mamá. Luego se separó de ellas y conoció a una mujer que le ofreció trasladarlo a su casa, pero lo abandonó en la sede del Sebin. Está imputado por incendio, intimidación pública, agavillamiento y daños violentos.
Luis Ospina: se dedica a vender café en la calle. Lo detuvieron frente a su casa, en la plaza Brión de Chacaíto, cuando iba a Salud Chacao a buscar un medicamento para su hijo. Lo imputaron por daños violentos y agavillamiento.
Miguel Cegarra: es vendedor de perros calientes en La Castellana. Lo capturaron en la puerta de su casa, en la calle La Joya. Fue imputado por daños violentos y agavillamiento.
Alfredo Ocando: es vendedor de huevos. Lo detuvieron junto a Miguel Cegarra. Fue imputado por daños violentos y agavillamiento.