Papel Literario

Transversos. Selección y traducción de Raquel Rivas Rojas. Textos de Ron Padgett

por El Nacional El Nacional

Una cabaña grande

Me gusta esta cabaña.

Me gusta mirar por la ventana

el estanque y los árboles que están más allá

con un silencio adentro.

Hace sesenta años yo era un niño

mirando un guante de beisbol en Oklahoma,

con la certeza de que al final iba

a regalárselo a alguien

y que no compraría ningún otro.

Verdaderamente

Usamos itálicas

para meterle electricidad a las palabras.

Entonces enchufamos lámparas

en las palabras.

Así es como iluminamos nuestras casas.

Verdaderamente.

Esperanza

¿Hay alguna esperanza para ti

o para cualquier otra persona?

Por supuesto que sí,

¿pero esperanza de qué?

La esperanza no es para algo,

es nada más un racimo de sentimientos.

Tic Tac

Cuando la gente dice

«Se acaba el tiempo»

Veo un reloj despertador

con su gran campana arriba

y con las manecillas sueltas

escapando como loco

de un cuarto en el que

el tiempo se ha detenido

recordándole al género humano

que se nos acaba el tiempo.

Me llevo esta idea

a un rincón del cuarto

y la dejo ahí

con mucho cuidado.

No quiero

que se despierte.

Entonces me voy

sin hacer ruido.

Barrer

Lo que quiero hacer

es olvidarme de todo

lo que alguna vez supe sobre poesía

y barrer del techo de la cabaña

las hojas de los pinos

y verlas volar al viento

de esta tarde de octubre.

La pluma es más fuerte que la espada

pero hoy la escoba

es más poderosa que la pluma.

Poema

Estás aquí

y si por un momento

relajas tu espalda

otras partes de tu cuerpo

van a llegar

y vas a poder

juntarte

contigo mismo,

una pequeña felicidad.

Reloj de pulsera

Acabo de escribir seis

o siete poemas breves

en media hora,

en una cabaña

frente a un estanque

con gotas de lluvia.

Tal vez debería

quedarme aquí

sentado un rato, dejar

que pase un tiempo

para que mi mujer piense

que he trabajado duro.

¿Lo viste?

Ya pasó un tiempo

pero tan despacio

que no te diste cuenta.

Se convirtió

en cielo.

Mira, ¡más tiempo!

Salió de mi reloj pulsera

y se volvió otra cosa.

Me rindo

Lo dejo

por hoy

pero mañana

voy a volver

con mi pluma

mi papel y mi identidad

a seguir mirando lo que pasa.

Sin rumbo

Se me olvidó el reloj.

El cielo está nublado esta mañana,

no hay ni señal del sol.

Salí de la casa como a las nueve

y he estado aquí por…

¿una hora? Menos,

creo.

Tengo

un estanque, un bosque, un cielo gris,

y una mente que vaga sin rumbo

de un momento a otro momento.

Confusión de tiempos

Estaba a punto de quejarme

de lo incómodo que es

tener que cambiar los relojes

dos veces al año sin

entender por qué, pero

de pronto un rayo de luz cayó

sobre el estanque y sobre mi cabeza

al mismo tiempo.

Consejo

A la gente le gusta repetir ese viejo dicho

«Vive cada día

como si fuera el último de tu vida».

¿Qué? ¿El último día de mi vida?

Yo estaría frenético, desesperado

saltando como un canguro

con guantes de boxeo

golpeando el aire,

intentando pelear

con lo que sea.

Lo que la gente quiere decir es

«Vive la vida a plenitud».

Como un canguro sin guantes de boxeo.

Metáfora

Hace frío en este cuarto

hasta que salgo afuera.

¿Será esta una metáfora

esperando por un significado?

Tal vez.

¿No está todo esperando por un significado?

Inténtalo,

dale a todo un significado.

Ve a ver qué tan lejos puedes llegar.

Apuesto a que no vas a ir muy lejos.

Gemelos chinos

Cuando estuve en China

tuve de pronto ganas

de estar en una cabaña en Vermont

recordando el momento

en que me imaginé todo esto

y ahora estoy aquí

en la cabaña

pero sin ganas de estar en China,

al menos no en este momento.

No necesito esas ganas:

los dos momentos ya se conectaron

como hermanos gemelos

que acaban de aprender a hablar entre ellos.

Telegrama

Esta mañana como a las cuatro

estaba en la cama pensando

en cómo iba a estar aquí

en esta cabaña escribiendo

y en cómo las líneas van

tan lejos como las palabras quieren.

Al final me levanté

y me preparé una avena,

pan tostado y té, de jasmín,

para poner algo de China en mí

y despertarme, como

un verdadero ser humano que

hace lo que tiene que hacer.

Y se detiene a tiempo.