Yo ya estaba en cuarentena. La misma sensación de aislamiento, la misma incertidumbre y ansiedad, el mismo cansancio perenne.
Sin embargo, no todo el balance es negativo. “No me gusta la ópera, y mucho menos el bel canto” era una de mis ideas fijas y que siempre repetí casi como un mantra. Un día cualquiera de cuarentena empecé con una ópera, maravillosa, de Donizetti: Don Pasquale. Después han seguido como un río otras, de él y de Bellini, y también de Rossini.
¿Que si le veo salida o futuro a toda esta situación? En mi horizonte inmediato solo vislumbro por los momentos a Verdi, Puccini y Wagner. Lo demás es una niebla espesa y muchas, muchísimas fake news. Y si a ver vamos, con las previsibles extensiones que de seguro harán a la cuarentena llegaré, en algún momento, al repertorio operístico del siglo XX o al más reciente.
Walther Sorg
En medio de esta situación tan desafiante desde muchos ángulos, agradezco a la cuarentena por esos minutos que ahorro de mi rutina y puedo invertir en mí. Solo el hecho de no tener que gastar tiempo en el transporte público, me ha permitido estar más tranquila y tener varias conversaciones conmigo misma. En esas charlas internas, me he reencontrado con mi niña interior (que quiere salvar al mundo con palabras y dibujos) y con la imaginación.
Shari Avendaño
Mi principal problema son los cortes diarios de energía eléctrica que sufrimos por acá en Mérida. Han sido mínimo de 7 horas (normalmente 2 veces al día) y hasta de 21 horas en un día malo. Eso me ha desbalanceado bastante. La oscuridad, el silencio, no poder trabajar, leer, estudiar o dibujar es algo que me ha golpeado. Intento ser sincero con los autorretratos que hago, la depresión puede ser un problema fuerte y quise mostrarme «tranquilizándome» a través de un abrazo. Ha sido necesario recordarme a mí mismo que puedo con los retos que tengo a pesar de las limitaciones. Constantemente estoy en ello.
Robert Dugarte
Descubrí un día que las cosas no desaparecen cuando oscurece. Pero en el corazón parecen adquirir otro carácter. Y en cierto modo, dar con ellas en medio de la oscuridad es como volverlas a conocer. Y vale la pena tantear la penumbra para existir dos veces.
Carlos Ortiz
En la cuarentena he hecho las paces con mi carácter, y he podido observar mucho más de cerca de qué manera mis emociones se atropellan con mi razón para hallar una certeza del futuro, simplemente me alejo del reflejo para percatarme de que la verdad solo existe en lo interior.
Helena García
Viajero: a principios de este año nació mi hijo. Él ha sido una nueva fuente de inspiración y tranquilidad en estos tiempos apremiantes. Mientras pequeños monstruos invisibles nos asechan, sigo dibujando y animando no sin una buena taza de café.
Kabir Rojas
Una sensación de haber despertado dentro de un cuento de JG Ballard. Las calles desiertas de la ciudad, las personas en el supermercado comprando víveres con una mascarilla en la boca, un virus mutante desatado por el mundo. De alguna forma ha sido creado por nosotros. De alguna forma ya nos ha contagiado a todos.
Lucas García Paris
*Se publica con la autorización del portal La Vida de Nos.